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Opinión Editorial


Inventar el futuro


Publicación:24-06-2020
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¡Menos pasado! ¡Más futuro! Bien podría ser el resumen de la propuesta del psicoanálisis, inventado por Freud

La mejor forma de predecir el futuro es inventarlo

Jorge Forbes

Less past! More present! – decía una camisa que portaba un joven desconocido que me encontré caminando por las calles de París hace algunos años. 

¡Menos pasado! ¡Más futuro! Bien podría ser el resumen de la propuesta del psicoanálisis, inventado por Freud, la cura por la palabra: localizar y resignificar el pasado en el presente para poder inventar un futuro en el presente, más de acuerdo con lo que se sabe se quiere y no se quiere. Por decirlo de manera breve y clara, saber cuándo se desea decir NO y cuando se desea decir SI, pudiendo sostenerlo ante los demás.

Que, si bien en algún punto el paciente puede hacer un recorrido por su vida, historizándola, narrándola al estilo de Gabriel García Márquez: “La vida no es la que uno vivió, sino la que se recuerda para contarla”, esto no es sino un pretexto, como las variadas formas de sufrimiento que podemos padecer las personas, para colocarnos en el presente, que siempre se nos ofrece como posibilidad de un futuro con nuevos y más frescos bríos; ya que en otro punto, el paciente también podrá descubrir que su vida no puede basarse en la mera repetición del pasado, su presente limitándose a una simple repetición pasiva de lo que le ha sucedido, en el recuerdo y actualización permanente de aquello que fue, pues de hacerlo, su presente/futuro, perderían potencia generativa y creativa. Pues más que recordar el pasado -como lo va a señalar en diversas ocasiones Jaques Lacan en su retorno a Freud- lo más importante es lo que se reformula y reinventa a partir de ello. Todos somos responsables de lo que emprendemos a partir de lo que alguien nos hizo y/o dijo.  

“Los neuróticos sufren de reminiscencias”-dirá el profesor Freud, a una audiencia americana, congregada para escuchar sus Cinco conferencias de introducción al psicoanálisis en Boston, Massachusetts; explicándoles que un síntoma neurótico, sea en el cuerpo o en el pensamiento, sería semejante a una persona, que en lugar de asumir con deseo y decisión sus labores diarias, ¡su vida misma!, se queda tendido lamentándose ante un monumento o estatua que adorna una ciudad, petrificado por el recuerdo de la tragedia que la escultura conmemora. Anclado a un más pasado con un menos futuro, yéndosele la vida en lamentos-, viviendo como si el futuro estuviera ya escrito y definido con un destino fatal, como si no pudiera “meter mano” a su propia existencia.

El psicoanálisis a cada momento ofrece a cada uno la posibilidad de recomenzar, de resignificar y reinventar el pasado, precisamente por su práctica y teoría siempre abiertas, incompletas, en constante amplificación. Justamente como la vida misma, que ella no existe ya escrita en algún lado (en el pasado familiar, el DNA, en los astros…) sino surge a cada instante, en el precioso instante presente, en el cual el sujeto siempre es responsable de hacer algo nuevo, inédito y singular, con aquello que le ha sucedido.

El mundo viene cambiando en sus lógicas desde hace ya tiempo y, no obstante que ha sido expresado en diferentes ámbitos (académicos, económicos, artísticos, psicoanalíticos…) no se ha logrado reconocer del todo. Sin embargo, hoy, el trauma mundial de la pandemia Covid-19, nos ha permitido vivirlo de manera clara y directa: nada es ni será como antes; todas las relaciones y dimensiones de la existencia humana se han tenido que transformar vertiginosamente. Gobiernos, hospitales, escuelas, empresas y familias, han cedido hábitos y costumbres que consideraban estables y seguras, primero, para protegerse y sobrevivir de algo que al inicio se pensaba de duración breve, cosa de pocos días, luego, para continuar y reinventar la vida en un contexto tejido de cambios permanentes. Por ejemplo muchas cosas que se sostenían con vehemencia argumentativa en la tradición jerárquica y burocrática, tanto en gobiernos, como en escuelas y empresas, han caído por su propio peso ante las nuevas experiencias que solicitan -como lo ha teorizado Jorge Forbes- soluciones marcadas por la invención y la responsabilidad.

Instagram: camilo_e_ramirez



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