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Opinión Editorial


La desmemoria regiomontana


Publicación:14-08-2024
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Es importante notar que la triada repetición, recuerdo y elaboración es una articulación interdependiente, por lo que no podríamos substraer ningún eslabón

"...desde el comienzo mismo la psicología individual es simultáneamente psicología social"

Sigmund Freud

En 1914 Sigmund Freud publica uno de sus trabajos más sobresalientes: recordar, repetir y reelaborar, en el cual plantea, entre otras cosas, la íntima relación que existe entre el recuerdo y la repetición: se repite en un intento por recordar, se recuerda para dejar de repetir (lo que hace daño), a través del proceso de elaboración.  

Recuerdo y elaboración: dos movimientos necesarios para que la repetición, sobre todo de aquello que hace daño, se transforme en algo más, lo que posibilita abrir un tiempo nuevo, evento de cambio, transformación y diferencia. Esto, como podemos constatar, aplica tanto para una persona, como una familia y una colectividad más amplia, la población de una ciudad, estado, país, ¡del mundo! 

Es importante notar que la triada repetición, recuerdo y elaboración es una articulación interdependiente, por lo que no podríamos substraer ningún eslabón, considerar cada elemento de manera aislada, sin caer en una posición ingenua y simplista, de ahí que se pueda hablar de recordar-repetir-reelaborar como un único proceso. Desprendiéndose una consecuencia:  sólo es posible elaborar aquello que ha tenido lugar en la repetición y gracias a la acción del recuerdo, del ejercicio de memoria que nos recupera, a su manera, los puntos y coordenadas de aquella escena que, hasta ese punto y de manera misteriosa, se venía activando una y otra vez. En ese sentido es el recuerdo de la repetición lo que posibilitará su análisis (separar en partes) y subsecuente elaboración, determinar su causa y sus efectos, a fin de poder tomar una postura responsable ante la repetición misma: ¿qué tengo que ver yo con eso que tiendo a repetir? ¿cuál es la función que esa repetición cumple en mi vida? ¿en qué contexto se activa? ¿qué decisión deseo tomar a partir de lo que me concierne en mi repetición? Ya que, como sintetiza la sabiduría popular, "Nadie aprende en cabeza ajena". 

Tanto en un psicoanálisis individual, como en el de una colectividad, es decir, tanto en la psicología individual, como en la psicología social, podemos localizar las marcas de la repetición, sus causas y efectos. A partir de dicho paralelismo se localizan los síntomas en las personas y en las colectividades. En el caso de una población de una ciudad, como lo es Monterrey, encontramos –como en otros lugares—un síntoma muy característico, la confusión y la desmemoria: de una búsqueda, a veces azarosa, otra sistemática y bien planeada por suprimir de la crónica urbana ciertos eventos (eventos criminales, asesinatos, masacres, injusticias laborales, desaparición forzada, diseños urbanos basados en la explotación rapaz de la naturaleza, familias con cierto poder económico y político con hijos cuyo comportamiento raya en lo criminal, deficiente movilidad urbana...) que tocan los principios y pilares de las clases y familias dominantes, en un ejercicio por olvidar hechos históricos que han ayudado a dar forma a la idiosincrasia regiomontana, la forma de vivir, trabajar, festejar, manejar, estudiar de la ciudadanía. Ser consciente de esos eventos, su contexto histórico, efectos y razón de ser, significa desear recuperar una parte muy importante de nuestra vida social, familiar y personal, saber por qué se repite siempre la misma historia, los mismos síntomas que dañan a unos y benefician a otros, a fin de poder hacer una elaboración de algo diferente que pueda ser mejor a lo ya conocido. 





« Camilo E. Ramírez »