banner edicion impresa

Cultural Exposiciones


Plasma en viaje circular pueblos originarios

Plasma en viaje circular pueblos originarios
La muestra reúne 102 piezas.

Publicación:28-01-2023
++--

El título de la muestra refiere a un viaje introspectivo en términos de cultura e identidad

El Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey es la sede de la exposición “José Bedia. Viaje circular”, una retrospectiva que plantea un recorrido por la propia producción del artista y las culturas ancestrales que lo influyen.

La muestra curada por Taiyana Pimentel, directora del MARCO, y José Bedia Fuertes, director del estudio del artista, reúne 102 obras de arte, en su mayoría pinturas, dibujos e instalación.

El título de la muestra refiere a un viaje introspectivo en términos de cultura e identidad, pues el arte de Bedia desdibuja las fronteras entre los pueblos originarios de América Latina a partir de lo simbólico, lo primigenio y lo sagrado; haciendo actuar el pasado como valor activo en el presente. De esta manera, el artista genera una simbiosis entre las culturas primigenias y el arte contemporáneo.

En 1997, MARCO exhibió Crónicas americanas: obras de José Bedia, enfocada en la influencia de las culturas ancestrales del continente americano, la mayoría creadas en esa década.

Ahora en la muestra Viaje circular predominan sus creaciones a partir del 2000 hasta las más actuales, también se incluyen creaciones tempranas, la más antigua de 1978.

La muestra José Bedia. Viaje circular se compone por una selección de 102 obras. Dos instalaciones realizadas estarán al inicio y al final de la exhibición. La llegada del Cristo recibirá al público, mientras que Mbwa Ndoki se encontrará el final.

Asimismo, la gran mayoría de las obras se concentran en secciones que reflejan sus etapas de producción de distintas épocas y e intereses.

La primera reúne dibujos realizados entre 1978 hasta 1990. Los más tempranos son ocho que pertenecen a la serie Crónicas americanas, no incluidos en la exhibición de 1997. En esa época, el artista recurría a libros de etnografía y antropología, es decir, aun no tenía un contacto directo con las comunidades. La obra incorpora fotografía etnográfica y pintura aplicada con huellas dactilares, como si fuera el cuaderno de un antropólogo encontrado por un indígena que lo intervino con pintura. Además, el artista agregó apuntes del diario de Cristóbal Colón copiando su caligrafía.

La segunda etapa se encuentran dibujos esquemáticos con un personaje que surgió luego de su iniciación en 1983 en el Palo Monte Mayombé, una de las principales prácticas religiosas afrocubanas, junto a la Santería. Algunas piezas de la serie sin título son: Vivir para ver el gran día que amanece y la luz que inunda el mundo y Único testigo e Incorporarse el águila (una referencia indirecta a México) todas realizados entre 1984 y 1990.

Para el tercer apartado se reúnen pinturas con influencia en las culturas ancestrales mexicanas, que el artista estudia desde 1986, cuando visitó por primera vez el País. Entre estas comunidades están los grupos concentrados en el Norte de México, como los seris, los yaquis y los mayos del desierto sonorense, y los también asentados en diferentes regiones de la Sierra Madre Occidental: los tarahumaras, los coras y los huicholes. Las obras fueron elaboradas sobre amate de manufactura otomí, papel vegetal que data desde la época prehispánica. En la obra En el principio, el primer jaguar (2021), aborda los arquetipos que refieren al origen en la mitología prehispánica de México, el jaguar y el maíz.

La cuarta sección consta de obras con formatos circulares y ovales, por un lado desafiando el tradicional formato cuadrado y por otro refiriéndose a la cosmovisión circular del universo, otorgando una lectura más libre al público. Una de las piezas es Progresión de la liebre (2009), acerca de la fábula de la liebre y

Por último, cabe mencionar que, la exposición permanecerá hasta el 7 de mayo del 2023 en MARCO.



« El Porvenir / César López »