La Sirenita – Un festival descolorido de nostalgia

Previo a ver la nueva película de Disney, y uno de los estrenos más comentados del año, debo confesar que no he visto ninguno de los Live Actions del estudio, esto por una cuestión personal basada en el desagrado hacia la compañía por querer hacer dinero apoyándose de lleno en la nostalgia del espectador y eso es justo lo que hace la cinta, así como el resto de Live Actions a la fecha.  

No he visto la versión "original" de "La Sirenita", sin embargo, desde las primeras secuencias, el cineasta Rob Marshall nos presenta a sus personajes con la intención de sorprendernos, como diciendo, sí, esta es 'Ariel' y este es el 'Rey Tritón' y aquí está la villana 'Úrsula', todo a través de travellings que recorren sus cuerpos, ello para rememorar las infancias de niños y niñas que crecieron viendo la película animada de 1989, es decir, apelando a sus recuerdos.

Lo que Marshall y el guionista Dave Magee pretenden es complacer al público calcando la premisa de la versión de los 80s, con los únicos cambios en las melodías, en la ambientación y en el color de piel de sus protagonistas, el cual sin duda, ha sido el rasgo menos importante y más comentado por la audiencia desde que se confirmó la película.

"La Sirenita" no para nunca, el montaje va de prisa y la banda sonora no se detiene, como si Marshall no quisiera que el público se distraiga ni un minuto, por tanto, prefiere sacrificar la profundidad de sus personajes y su trama en favor del entretenimiento. 

Los diálogos se enfocan en describir lo que va ocurriendo, es decir, las líneas tiran de la exposición para contextualizar a la audiencia, en lugar de mostrar, Marshall cuenta todo respecto al mundo que habita ´Ariel´, volviéndolo aburrido y opaco, pese a ser una historia de amor repleto de magia y colores.

Pese a ello, "La Sirenita", como el musical de Disney que es, va de lleno a su fuerte, las canciones, apartado en el que su protagonista y antagonista brillan más, ello debido a las actuaciones de Hallé Bailey y la siempre carismática Melissa McCarthy. 

Asimismo, es cuando Marshall pisa el freno y deja que sus personajes se expresen y se conozcan, sin diálogos, ni música, es cuando "La Sirenita" ofrece algo más. Lástima que esos momentos sean tan pocos y breves.

Pese a esto y toda la obviedad de Disney, es en el reparto que se aprecia algo de la magia de la que gozaron las versiones animadas del siglo anterior, magia con la que muchas generaciones crecieron y que echan de menos.

Lamentablemente, siguen sin encontrarla y, visto el panorama, dudo mucho que vuelvan a dar con ella.

"La Sirenita" estrena este jueves en salas de cine de Monterrey. 

Director: Rob Marshall

Reparto: Halle Bailey, Melissa McCarthy, Javier Bardem, Jonah Hauer-King, Jacob Tremblay, Daveed Diggs