Pierde aeronave una rueda antes de despegar

Un suceso inusual marcó el sábado pasado en el Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta, cuando un Boeing 757 de Delta Airlines, identificado como el vuelo 982 con destino a Bogotá, Colombia, perdió una de sus ruedas mientras se alistaba para despegar. La Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos ya ha iniciado una investigación para determinar las causas detrás de este incidente.

El vuelo, que estaba programado para partir hacia la capital colombiana, se vio afectado por este percance, generando preocupaciones adicionales debido a que la aeronave en cuestión es un modelo más antiguo en comparación con otros aviones Boeing que han experimentado problemas recientemente. La industria aérea estadounidense, y en particular los fabricantes de aviones, ha estado bajo escrutinio por diversas fallas técnicas en sus equipos.

Tras el aterrizaje de emergencia, los 172 pasajeros a bordo, junto con los dos pilotos y los cuatro tripulantes, fueron evacuados de manera segura y trasladados a otro avión de reemplazo, según informó Delta Airlines en un comunicado. La aerolínea expresó sus disculpas a los pasajeros por las molestias ocasionadas, subrayando su compromiso con la seguridad y el bienestar de los viajeros.

Este incidente se suma a una serie de eventos que han afectado a aviones Boeing en los últimos tiempos, recordando el incidente a principios de año en el que un Boeing 737 de Alaska Airlines perdió un panel de la puerta, llevando a un aterrizaje de emergencia en Oregón. Desde entonces, partes de la pieza desprendida han sido halladas en distintas áreas locales, generando inquietudes sobre la seguridad de estos modelos de aeronaves.

La investigación en curso buscará arrojar luz sobre las circunstancias exactas que llevaron a la pérdida de la rueda en el vuelo 982 de Delta Airlines, mientras la industria aérea continúa enfrentándose a la necesidad de abordar y solucionar los problemas técnicos para garantizar la confianza y la seguridad de los pasajeros.

Un evento extremadamente raro

Según estadísticas proporcionadas por la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA), los incidentes de este tipo representan una fracción mínima de los millones de vuelos realizados anualmente en todo el mundo. De hecho, el informe anual de seguridad de la FAA señala que la tasa de accidentes aéreos comerciales graves, que incluyen eventos como la pérdida de componentes críticos, es de aproximadamente 0.2 por cada millón de vuelos.

En el caso específico de aviones Boeing, cuyos modelos han estado bajo escrutinio debido a varias fallas técnicas, las estadísticas indican que la gran mayoría de los vuelos se desarrollan de manera segura. Según datos compilados por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la tasa global de accidentes de aviones comerciales en 2022 fue de 1.74 por cada millón de vuelos programados. Aunque este tipo de incidentes son poco frecuentes, la IATA y organismos reguladores como la FAA continúan trabajando en estrecha colaboración con la industria para mejorar aún más la seguridad aérea y abordar cualquier problema identificado durante las investigaciones.

Es importante destacar que las compañías aéreas y fabricantes de aeronaves invierten considerablemente en tecnología, mantenimiento y entrenamiento de la tripulación para mitigar el riesgo de incidentes como la pérdida de una rueda.