Sonic 3 – La mejor película de la trilogía

Hasta ahora, la saga de Sonic se ha concentrado en ofrecer entretenimiento para toda la familia, sobre todo a los más pequeños, a través de chistes, acción y problemas fáciles de resolver. Es una franquicia que prefiere no retar a su audiencia a través de momentos dramáticos, priorizando la comedia y la ausencia de problemas, una de las principales características del cine actual en Hollywood. Por ello es que encuentro gratificante que esta, la tercera parte, se anime a mostrar un lado más vulnerable de sus personajes y nadie mejor que Shadow para exhibirlo en la gran pantalla.

Sonic 3 arranca con el intenso escape de Shadow de una prisión en medio del mar, celda en la que ha permanecido por 50 años guardando y aumentando su rencor hacia la humanidad por motivos enteramente comprensibles. Mientras tanto, Sonic y sus amigos celebran un año de la llegada del veloz erizo al planeta Tierra. Durante una de las pocas escenas en calma, el héroe le confiesa a Tom,  amigo convertido en su padre, que echa de menos su hogar. El hombre le dice que es importante extrañar, pues lo que se ama siempre vivirá dentro de uno y, además, lo felicitó por no dejar que la perdida de su origen lo llenara de odio.

La charla es breve, pero importante porque despliega los temas de la saga a través de sus personajes, humanizándolos entre tantos efectos y montajes frenéticos. Desafortunadamente, no abundan los momentos así, pero se agradece que haya aunque sea unos pocos. Poco después, Shadow llega a Tokio y trata de familiarizarse con el entorno, sin embargo, antes de que pueda 'volver' al mundo que lo dejó atrás, es atacado por los soldados de GON, organización que pretende encarcelarlo nuevamente. Es mala idea, ya que este erizo es mucho más fuerte que el resto y cuando llaman a Sonic, Tails y Knuckes, poco o nada pueden hacer contra él.

Uno de los elementos que más funciona en Sonic es la incorporación de Jim Carrey como Robotnik, el villano de nuestro protagonista que acá brilla todavía más porque se aparta de esa posición para emprender un viaje sobre su identidad. Por el camino, bueno y malo unen fuerzas para frenar a Shadow y al científico que lo estudió durante sus primeros años en nuestro mundo, Gerald Robotnik, el abuelo del Dr. Huevo que esconde sus verdaderas intenciones.

La cinta habla sobre el rencor y los duelos que no pudieron resolverse, poniéndolo de ejemplo en Sonic y Shadow, protagonista y antagonista de la historia. En medio se encuentra Robotnik y, más al fondo, Gerald, quien, cegado por el odio, está dispuesto a llegar a las últimas consecuencias para vengarse. Esa dinámica le añade una complejidad no vista en las dos películas anteriores porque, puede que Sonic sea el gran héroe, pero la estrella de esta nueva aventura es Shadow, quizás, el personaje más matizado de las tres entregas.

Pese a la carencia de drama y la saturación de chistes y escenas de acción, Sonic 3 se atreve a romper el molde que había forjado para exponer el drama que toda historia debería tener, alcanzando lugares un tanto más memorables para el espectador en comparación con la primera y la segunda.

La tercera parte de Sonic ya está disponible en la cartelera de Monterrey.

Director: Jeff Fowler

Reparto: Jim Carrey, Ben Schwartz, Keanu Reeves, Idris Elba, James Marsden, Kriysten Ritter, Tika Sumpter.