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La Liga MX iría todo el 2020 a puerta cerrada

La Liga MX iría todo el 2020 a puerta cerrada
La evolución de la pandemia determinará la presencia del público en eventos deportivos.

Publicación:22-06-2020
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Ricardo Cortés, director general de Promoción de la Salud dijo que es una posibilidad latente y dependerá del avance de contagios de coronavirus

La Liga MX debe prepararse para un torneo sin aficionados durante el Apertura 2020. Programar un certamen a puerta cerrada no es el peor escenario posible —ya que ese sería el de una nueva suspensión de actividades—, pero sí será una medida clave para bajar los contagios de Covid-19 en el país.

Ricardo Cortés, director general de Promoción de la Salud, reconoció la probabilidad de mantener los estadios vacíos, ya sea en el futbol, beisbol, basquetbol y otros deportes, hasta que termine el año.

“La posibilidad existe y lo más interesante es que depende de nosotros, como sociedad, en atender a las recomendaciones sanitarias y a las autoridades federales o locales para disminuir la cantidad de contagios y, así, regresar a los eventos deportivos”, comentó el funcionario, en entrevista con EL UNIVERSAL Deportes.

Las prevenciones que se tomarán van más por los aficionados que por los mismos jugadores. Las preocupaciones recaen en los traslados que pueden realizar algunos seguidores, sobre todo si salen de entidades con el semáforo rojo en contagios.

“En la Ciudad de México vamos para abajo [en contagios] y en Guanajuato, por ejemplo, van para arriba. Lo más probable es que cuando la CDMX esté en semáforo amarillo, León esté en rojo. Creo que la decisión de los clubes debe ser jugar con todos los estadios a puerta cerrada mientras uno no pueda abrirse; sería lo ideal, al menos tener muy controlado el acceso. Un ejemplo sería que sólo los abonados, la gente que vive en la ciudad, pueda ingresar, si vamos a abrir los estadios al 50% [de su capacidad]”, indicó.

Los estadios se abrirán cuando el semáforo de sus entidades esté en amarillo y al 50%, en el mejor de los casos. Ahí viene otra consideración, ya que los recintos tienen diferentes aforos.

“Por ejemplo, el Azteca. Consideramos que exista acceso para la mitad de la capacidad, ¿cómo vamos a meter a 40 mil personas? Tenemos que encontrar rutas de acceso y de salida. Probablemente, agendar horarios de entradas en las zonas y expandir los estacionamientos y túneles”, explicó.



« El Universal »