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Olas de calor de las peores en décadas
Publicación:21-06-2023
TEMA: #Cultura
La temperatura más alta registrada en las dos últimas décadas en Monterrey se presentó el 2 de mayo de 2002, con 46°C
MONTERREY, NL. - La población de la zona metropolitana de Nuevo León sufre una de las peores olas de calor
que se recuerden en décadas, no sólo por los valores registrados que van de los 40 a los 45°C, sino también por la duración de ésta, en la que este lunes se cumplen diez días consecutivos.
El viernes pasado, madres de familia reportaron que, en la escuela secundaria número 34 "Pablo Livas", de la colonia Nochebuena en Ciudad Guadalupe, al menos diez alumnos sufrieron golpe de calor y algunos tuvieron desmayos. Por lo que las autoridades educativas y del gobierno estatal acordaron que a partir de este lunes y mientras permanezcan tales condiciones climáticas quede a discreción de los padres mandar a sus hijos a los planteles, o tomar sus clases de manera virtual.
La temperatura más alta registrada en las dos últimas décadas en Monterrey se presentó el 2 de mayo de 2002, con 46°C; sin embargo, según meteorólogos, las olas de calor duraban de dos a cuatro días, y no se había presentado una onda cálida tan prolongada como la de este junio.
Desde las diez de la mañana, el bochorno se vuelve intolerable, pero es más intenso entre las 11 y las 17:00 horas, un tiempo no recomendado por las autoridades para realizar actividades al aire libre, caminar o hacer ejercicio.
Sin embargo, hay labores que no pueden evitarse en las fábricas, en el servicio público y en el comercio, por eso la ciudad no pierde su ritmo, y a cualquier hora se observa el ir y venir de gente que a pie, en automóvil, en transporte urbano o en el Metro se desplaza para realizar sus actividades diarias.
En estas condiciones de calor, camiones viejos sin aire acondicionado, como los de las rutas 99 y 223, que dan servicio a la población de Guadalupe y Juárez, convierten en un martirio traslados cortos de 15 minutos a media hora.
Algunos pasajeros con rostros bañados en sudor, las espaldas mojadas y la ropa adherida al cuerpo, con gesto de fastidio utilizan las gorras para echarse aire en la cara. Llevar las ventanas abiertas puede resultar contraproducente porque puede ingresar el aire caliente que irradia desde el pavimento.
En las calles se observan trabajadores que realizan labores esenciales, como los del sistema de recolección de basura, policías, oficiales de tránsito, bomberos y brigadistas de Protección Civil, así como taqueros con sus puestos, vendedores de gelatinas y de botellas con agua fresca que se colocan en los principales cruceros de la ciudad bajo el rayo del sol.
Asimismo, en las avenidas se observan grupos de seis a ocho personas, los llamados Testigos de Jehová, que después de tocar alguna puerta permanecen estoicos, protegidos por una sombrilla, esperando a ver si sale algún vecino dispuesto a escuchar su palabra. Conscientes de las inclemencias del tiempo, su labor evangelizadora la realizan por ahora únicamente de 07:30 a 11 horas, cuando la temperatura ya alcanza los 33, 34°C.
Para ellos representa un gozo "compartir buenas noticias", no dejan de salir a predicar con frío, lluvia o calor, incluso hay quienes tienen más de 50 años realizando esta labor, comenta un hombre del grupo evangelizador en el que también hay dos mujeres que deben rebasar los 70 años.
A pleno sol del mediodía, Gerardo, un hombre que se ganaba la vida como taxista y que ahora está imposibilitado para esa actividad porque le fueron amputadas ambas piernas, sale por las calles de su colonia en Ciudad Guadalupe a hurgar entre los recipientes de basura para recoger latas de aluminio que espera vender por kilo.
En esta ciudad donde son tradicionales las carnes asadas con leña o carbón, ni el calor les causó mella, pues este domingo donde el registro meteorológico estableció valores mínimos de 26 y máximos de 43, hubo celebraciones por el Día del Padre.
De acuerdo con el meteorológico para este lunes y martes se esperan temperaturas de 26°C como mínima y máxima de 45, mientras que para el miércoles y jueves se pronostican mínimas de 26 y máximas de 44°C.
Igualmente, debido a que se ha registrado un incremento en el consumo de agua potable, que pasó de 14 mil a más de 17 mil 500 litros por segundo, autoridades estatales pidieron a la población que haga un uso racional del recurso para evitar problemas en el suministro.
El viernes pasado, madres de familia reportaron que, en la escuela secundaria número 34 "Pablo Livas", de la colonia Nochebuena en Ciudad Guadalupe, al menos diez alumnos sufrieron golpe de calor y algunos tuvieron desmayos. Por lo que las autoridades educativas y del gobierno estatal acordaron que a partir de este lunes y mientras permanezcan tales condiciones climáticas quede a discreción de los padres mandar a sus hijos a los planteles, o tomar sus clases de manera virtual.
La temperatura más alta registrada en las dos últimas décadas en Monterrey se presentó el 2 de mayo de 2002, con 46°C; sin embargo, según meteorólogos, las olas de calor duraban de dos a cuatro días, y no se había presentado una onda cálida tan prolongada como la de este junio.
Desde las diez de la mañana, el bochorno se vuelve intolerable, pero es más intenso entre las 11 y las 17:00 horas, un tiempo no recomendado por las autoridades para realizar actividades al aire libre, caminar o hacer ejercicio.
Sin embargo, hay labores que no pueden evitarse en las fábricas, en el servicio público y en el comercio, por eso la ciudad no pierde su ritmo, y a cualquier hora se observa el ir y venir de gente que a pie, en automóvil, en transporte urbano o en el Metro se desplaza para realizar sus actividades diarias.
En estas condiciones de calor, camiones viejos sin aire acondicionado, como los de las rutas 99 y 223, que dan servicio a la población de Guadalupe y Juárez, convierten en un martirio traslados cortos de 15 minutos a media hora.
Algunos pasajeros con rostros bañados en sudor, las espaldas mojadas y la ropa adherida al cuerpo, con gesto de fastidio utilizan las gorras para echarse aire en la cara. Llevar las ventanas abiertas puede resultar contraproducente porque puede ingresar el aire caliente que irradia desde el pavimento.
En las calles se observan trabajadores que realizan labores esenciales, como los del sistema de recolección de basura, policías, oficiales de tránsito, bomberos y brigadistas de Protección Civil, así como taqueros con sus puestos, vendedores de gelatinas y de botellas con agua fresca que se colocan en los principales cruceros de la ciudad bajo el rayo del sol.
Asimismo, en las avenidas se observan grupos de seis a ocho personas, los llamados Testigos de Jehová, que después de tocar alguna puerta permanecen estoicos, protegidos por una sombrilla, esperando a ver si sale algún vecino dispuesto a escuchar su palabra. Conscientes de las inclemencias del tiempo, su labor evangelizadora la realizan por ahora únicamente de 07:30 a 11 horas, cuando la temperatura ya alcanza los 33, 34°C.
Para ellos representa un gozo "compartir buenas noticias", no dejan de salir a predicar con frío, lluvia o calor, incluso hay quienes tienen más de 50 años realizando esta labor, comenta un hombre del grupo evangelizador en el que también hay dos mujeres que deben rebasar los 70 años.
A pleno sol del mediodía, Gerardo, un hombre que se ganaba la vida como taxista y que ahora está imposibilitado para esa actividad porque le fueron amputadas ambas piernas, sale por las calles de su colonia en Ciudad Guadalupe a hurgar entre los recipientes de basura para recoger latas de aluminio que espera vender por kilo.
En esta ciudad donde son tradicionales las carnes asadas con leña o carbón, ni el calor les causó mella, pues este domingo donde el registro meteorológico estableció valores mínimos de 26 y máximos de 43, hubo celebraciones por el Día del Padre.
De acuerdo con el meteorológico para este lunes y martes se esperan temperaturas de 26°C como mínima y máxima de 45, mientras que para el miércoles y jueves se pronostican mínimas de 26 y máximas de 44°C.
Igualmente, debido a que se ha registrado un incremento en el consumo de agua potable, que pasó de 14 mil a más de 17 mil 500 litros por segundo, autoridades estatales pidieron a la población que haga un uso racional del recurso para evitar problemas en el suministro.
« El Universal »
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