Nace Chabelo y México vive la crisis de la moneda de plata

CIUDAD DE MÉXICO.- En 1935 nació Xavier López , "Chabelo", cuya muerte fue reportada este sábado a EL UNIVERSAL por Jessica Neville, publirrelacionista del actor.
México tenía entonces una población cercana a los 18 millones de personas, una séptima parte que ahora, quienes fueron testigos de la crisis platista.
Desde los tiempos de la Colonia, la fortuna económica del país estuvo inexorablemente vinculada a la plata, metal que, en opinión del economista mexicano Miguel Palacios Macedo, había sido "como un barómetro" del bienestar nacional "a través de toda nuestra historia económica".
La plata tenía una importancia de carácter doble. Por un lado, estaba su gran relevancia dentro de las exportaciones y la actividad productiva, cuenta el economista Eduardo Turrent Díaz, quien estuvo a cargo del proyecto: "Historia del Banco de México".
Por el otro, la plata servía como moneda de curso legal pleno en 1935, misma que tenía signo fiduciario, pero su valor estaba vinculado con el precio internacional del metal blanco, cuyo incremento llevó a la desmonetización del peso de plata en abril de 1935.
"En 1935, el precio de la plata se eleva ininterrumpidamente y deriva en una crisis sin precedente. Se corre el riesgo de que el valor intrínseco de las monedas de ese metal, las cuales integraban el grueso de la moneda fraccionaria o de apoyo, supere a su valor facial. El peligro se cierne en especial sobre las piezas de un peso, que gozaban de gran arraigo entre la población", explica Banxico en su página web.
Expone que la crisis platista se conjuró a partir de dos medidas: emitiendo piezas con menor contenido de plata, y poniendo en circulación billetes de esa denominación que por largos años se conocieron como "camarones".
"El relato de la crisis platista de 1935 es un episodio más en la vinculación de México al mercado internacional, a través de un esquema dependiente del tipo centro-periferia", explica Turrent Díaz.
Todavía a principios de los años 40, los mexicanos conservaban resabios de su tradicional desconfianza por el papel moneda y manifestaban preferencia por la moneda de plata, dotada de valor intrínseco, aunque fuese parcial.