Como si no corrieran suficiente riesgo, los trabajadores de la educación siguen sufriendo las de Caín no nada más ante el fantasma del Coronavirus.

Resulta que un par de maestros fueron asaltados en su escuela a donde asisten a diario, aunque aún no inician las clases presenciales.

Los trabajadores del gis se llevaron el susto de su vida, cuando personas empistoladas los abordaron en la escuela de la colonia Independencia.

El atraco se registró al interior de la secundaria número 13, donde los asaltantes sorprendieron a los maestros, quienes fueron agredidos.

Y, que el hecho pone en evidencia no nada más la zona de alto peligro donde se enuentra el plantel, sino la falta de vigilancia policiaca.

Con eso de que una de las demandas principales de la ciudadanía tienen que ver con el combate a la inseguridad, no dude ni tantito que las autoridades municipales ''se pulan'' para obtener su policía modelo.

Así que tome asiento, lugar y tabla porque el reto es más que importante, y por lo que se sabe, la idea principal es brindar resultados y evitar las pifias, porque las autoridades tienen proyectos futuristas.

Dicen los que dicen que saben, que no hay peor ciego que el que no quiere ver.

Y, si no lo quiere creer vale preguntar cómo es posible que los puesteros afloren.

Pero lo peor de ello es, que se hayan cambiado las cabezas en Monterrey, nada más.

Por lo que ahora hasta la dirigencia panista de Monterrey demanda limpia general.

A menos que se otorgue una vez más el voto de confianza a quienes ya se amañaron.

Como si se tratara de un juego de adivinanzas o de aquellos que se identifican clásicamente en las ferias de: Dónde quedó la bolita, así parece suceder con ciertos recursos estatales de las escuelas en Nuevo León.

Resulta que aquellos 150 millones de pesos aprobados por el Congreso del Estado y etiquetados para el uso y mantenimiento de las escuelas públicas, nunca llegaron y es más no aparecen por ningún lado en las cuentas públicas del 2021.

Por lo que la pregunta de los 64 mil pesos es, si la lana se avaló, se publicó en el periódico oficial del estado y el director del ICIFED, Javier Fidencio Martínez no sabe, entonces quién tendrá la respuesta de esos recursos.

Total a como pintan las cosas, que parecen ya ''una costumbre'', no le extrañe que para cuando aparezcan o lleguen los dineros se pierdan por aquello del subejercicio como ha sucedido en otras cuestiones, pero mejor ahí le cortamos.

Ahora que se busca reestructurar el transporte camionero, habrá que ver en que parte de los nuevos proyectos se incluyen los taxistas.

Especialmente por aquello que tiene que ver con las denuncias del usuario por el banderazo y que muchos cobran lo que quieren.

Que el uso del taxímetro es a discreción y que en fechas especiales, los taxistas saben hacer su agosto cualquier fecha del año.

Si es festivo, si llueve, total, las excusas nunca faltan y lo que sobran son los pretextos, por lo que ahora habrá que ver qué sucede.