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Opinión Columna


Samuel podría estar viviendo los tiempos más estresantes


Publicación:22-07-2021
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La presunta multa de 55 millones de pesos que pretende aplicarle el INE desde luego le estaría causando más que un fuerte dolor de cabeza poselectoral

Sin lugar a dudas, en estos momentos Samuel García Sepúlveda podría estar viviendo los tiempos más estresantes de su vida, después de las elecciones que le dieron el triunfo por la gubernatura en Nuevo León.
La presunta multa de 55 millones de pesos que pretende aplicarle el INE, por la omisión del cobro de su esposa como Influencer, desde luego le estaría causando más que un fuerte dolor de cabeza poselectoral.
Y, que independientemente del proceso que esto implique, le da vida a una serie de especulaciones de momento sin respuesta y que tienen que ver, de dónde saldrá el dinero para cubrir dicha sanción.
O, si el gobernador electo, como advierte, pudiera dar la pelea ante un organo electoral que ya estableció paradas y un alto costo, que podría complicar las cosas, si se suma algún otro recurso a los gastos de campaña.
Pero como eso es ya entrar en el mundo de las especulaciones y como no nos gusta el chisme hasta ahí le cortamos, sin descartar nada, cuando se habla hasta de la anulación de las elecciones. Usted, qué opina.


Sean peras o manzanas, una cosa es más que clara, que al gobernador electo no le ha sobrado tiempo para responder muchas cuestiones de sus ''fan´s´´ en torno a la pretendida multa del INE.
Por lo que aprovechando todos los medios habidos y por haber, se ha dedicado en serio a explicar como dice la raza, con bolitas y palitos, cuál es su visión en torno a éste espinoso tema.
Y, que a decir del propio Samuel García en sus videos, detalla su particular punto de vista, por el cobro que su esposa no le hizo en calidad de Influencer y que éste día habría de votar el INE.
Así que vale parar oreja para averiguar el desenlace del problema que trae más de tres con los pelos de punta y como reconoce el muchacho, todo podría llegar a feliz puerto, según dice.


Aunque el tema de los contagios de Covid-19 se presta para toda clase de expresiones, como aquella que es la más popular y que se aplica ''al millón'', el asunto no deja de ser poco serio en NL.
Sino al contrario, los especialistas en la materia advierten una tercera ola con el disparo más agresivo de casos en todos sus rubros, contagios, hospitalizados, intubados y hasta fallecimientos.
Tan es así, que ya hay quienes señalan hasta la posibilidad de ''resucitar'' los filtros vehiculares que alguna vez se aplicaron en los municipios para reducir la movilidad de los visitantes.
Y, que en el mejor de los casos, los contagios no se extendieran aún más a la mancha urbana no nada más en la metrópoli, sino hasta en entidades vecinas, donde se aplicaron ciertos protocolos.


Pero ya que andamos con el asunto de los contagios por Covid-19 éste día habrá que parar oreja, por si seguimos igual o las autoridades de Salud dictan nuevas normas.
Especialmente porque ante el incremento de la movilidad y en base a la experiencia, ya se sabe cómo bajar lo contagios y que a decir de la autoridad, no son nada populares.
Sobre todo, cuando se le baja a los negocios y establecimientos a los aforos, los horarios y se les mete lupa para que se vayan derechitos in chistar, para disminuir riesgos.


La verdad que los diputados locales, si no son ridículos dan hasta risa con sus ocurrencias, cuando tienen un montón de cuestiones por sacar y que andan de novedosos.
Pues ayer, con las primeras gotas que de se dejaron sentir por la lluvia, en plenos trabajos sacaron del legislativo, al interior del inmueble sacaron sus paraguas.
Como si no tuvieran los medios necesarios para exigir mantenimiento al edificio que ya ha recibido costosas ''manitas de gato'', denunciaron una serie de goteras.
Si, por si creíamos que ya lo habíamos visto todo, resulta que en el recinto se colocaron en el suelo un montón de recipientes como contenedores por la lluvia.
Y, como cereza del pastel, en pleno uso de la palabra se exhibió el mal estado del inmueble con el uso de paraguas y papelería mojada en los curules, así de ese tamaño.

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