En la actualidad, es innegable la creciente influencia de las mujeres en diversos campos laborales. Este progreso es el resultado de su constante lucha por la igualdad de derechos y oportunidades en áreas en las que antes resultaba inimaginable ver a una mujer desempeñando ciertas actividades.

El 8 de marzo se celebra como un día especial en honor a todas las mujeres valientes y luchadoras que, día a día, demuestran su capacidad. A pesar de enfrentar agresiones, represión e incluso la pérdida de vidas, estas mujeres se mantienen firmes con objetivos claros y elevan sus voces para ser escuchadas en relación con su situación.

La desaparición de mujeres, adolescentes y niñas es un problema que afecta a comunidades en todo el mundo, generando angustia y desesperación en las familias que buscan desesperadamente a sus seres queridos. A menudo, las mujeres son víctimas de violencia de género, trata de personas, secuestros u otras formas de desaparición forzada, enfrentando riesgos específicos debido a su género.

El Estado de Nuevo León, se enfrenta a una problemática alarmante: las tasas de desaparición de mujeres han superado consistentemente la media nacional. En el año 2021, esta cifra alcanzó un preocupante 7.42 desapariciones por cada 100 mil mujeres, en contraste con el promedio nacional de 4.45 por cada 100 mil. Este hecho, sumado al aumento constante de la desaparición de mujeres, ha situado a Nuevo León como el quinto estado con el mayor número de casos registrados, siendo superado únicamente por Zacatecas, Nayarit, Morelos y Jalisco.

De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) del 2018 a la fecha en Nuevo León lamentablemente se han registrado 987 mujeres desaparecidas y no localizadas.

Detrás de esta escalada de desapariciones se encuentran una serie de causas profundas que merecen una evaluación detallada. La violencia de género, la inseguridad pública, la trata de personas y la presencia del crimen organizado son algunos de los factores que se han señalado como influyentes en esta problemática.

Estos elementos se entrelazan, creando un ambiente propicio para la desaparición de mujeres en Nuevo León.

Por lo que tenemos que tomar medidas para abordar esta problemática, se han establecido comités y protocolos para la búsqueda y localización de personas desaparecidas, así como para atender a las familias afectadas. Sin embargo, queda un largo camino por recorrer, y se necesita una mayor cooperación entre los diferentes niveles de gobierno y la sociedad civil para lograr resultados más efectivos.

Por lo que es necesario la creación de una plataforma digital específica para la búsqueda de mujeres desaparecidas ya que esto se convierte en una herramienta crucial para aumentar las posibilidades de encontrar a estas personas y promover la participación de la comunidad en el proceso de búsqueda.

Uno de los aspectos importantes de esta plataforma es su capacidad para involucrar a la ciudadanía en el proceso de búsqueda. La plataforma permitiría a los ciudadanos reportar posibles avistamientos, pistas o detalles relacionados con un caso de desaparición. Esta colaboración activa puede ser esencial para ayudar a resolver casos y reunir a las víctimas con sus seres queridos.

Por lo que implementar políticas integrales para la prevención de delitos contra las mujeres son esenciales en la lucha contra la violencia de género. Estas políticas deben abordar tanto las causas subyacentes de la violencia como sus manifestaciones directas. Al educar, sensibilizar, proporcionar recursos y promover la igualdad de género, podemos crear un entorno en el que las mujeres estén protegidas, empoderadas y libres de temor.

La lucha contra la violencia de género es una responsabilidad colectiva que requiere el compromiso de la sociedad en su conjunto, y la implementación de políticas integrales es un paso vital hacia un mundo más justo y seguro para todas las mujeres