Autoridades Municipales y estatales, todos andan con el Jesús en la boca, pues ya está a la vuelta de la esquina el día en que tendrán que rendir su primer Informe de Gobierno y con la novedad de que no hay suficientes letras, ya no se piensa en palabras, con que rellenar el kilo de hojas donde escribirán lo  que tienen que decirle a los ciudadanos.

En su mayoría, se la pasaron disque revisando lo que les dejó su antecesor y esa etapa la estiraron por meses.

Hoy las promesas de campaña, sus compromisos, firmados y hasta notariado, son parte del pasado, del olvido y de solo decirles que se los llevó el viento del tiempo.

Los que se dicen asesores de los alcaldes y del mismo Gobierno del Estado, andan buscando hasta debajo de las piedras algo que les sirva para cumplir con el mandato que exige la Ley, de decirle al pueblo en que se gastaron los dineros públicos, porque de que se gastaron, se gastaron, pues las ciudades lucen debastadas, con sus calles convertidas en superficies lunares, colonias sin alumbrado público, basura acumulada en las equinas, semáforos que no controlan lo que deben controlar.

Ah y por cierto, todos se refugiaron en la pandemia del Covid y últimamente en la falta de agua y el desabasto de la misma.

Pero el pueblo no olvida y en la próxima contienda electoral cobrará facturas y aquellos políticos que nacieron y crecieron con piel de bebé, nomás no aguantarán las verdades que ya desde ahora, en sus consentidas redes sociales, les escriben y hasta les gritan pidiéndoles, no solo que se pongan a trabajar, sino que hasta renuncien.

Pues, los que siguen dando señales de que aún andan bien enchilados con el gobernador, son los diputados del PAN, que siguen con pintura de guerra en el rostro.

Tan es así, que ya advirtieron que no aprobarán vía fast track el presupuesto estatal, dando a entender que continúan mal y de malas con Samuel García.

Pero éste a su vez, sin hacerle tanto caso a la actitud de los legisladores, que él tiene muchas esperanzas en la labor del legislativo en beneficio de la entidad.

Por lo que vale darle el voto de confianza y tan pronto se tengan que analizar cuestiones en común, se valoren la importancia del beneficio en general.

Paco Martínez Calderón, dirigente de los maestros federales, tuvo ayer reunión con la estructura sindical de la Región de Guadalupe, como lo está haciendo con las demás regiones, para actualizarlos de las acciones que prepara la Secretaria de Educación para el inicio del ciclo escolar.

Paco, quien tuvo “casa llena”, después de su alocución conversó en particular con los secretarios generales delegacionales y representantes de centros de trabajo, para conocer las necesidades de sus representados y a la vez sugerencias para solucionar problemas existentes.  Ósea aceitó la maquinaria sindical.

En la Secretaría de Educación del estado hay una funcionaria que ya no la aguantan propios ni extraños, pues a pesar de que es una Subsecretaría, se cree la mera mera y trata al personal de cualquier nivel de manera despótica y humillante.

Nadie quiere acercársele porque por lo general, por una cosa u otra sale regañado, así no venga al caso y lo peor, dicen que a la poblana no la quieren denunciar ante Sofialeticia Garza, porque es la funcionaria consentida.

El 21 de agosto en la Gran Plaza, el Gobierno fosfo fosfo le rendirá homenaje a Celso Piña, “El Rey del Acordeón” y participará una serie de agrupaciones vallenatas y una cantante cumbianchera que actuará por una muy buena lana que se ganará en una hora de espectáculo.

Esos millones de pesos, no se verían mejor aplicados al Programa Universal de los niños con cáncer o a  las madres que requieren tratamiento por el cáncer de mama, o a la renta de más pipas para llevar agua a muchas colonias que aún sufren el desabasto del vital líquido?... Son preguntas que ya transitan en el mundo de las redes sociales.

El Homenaje lo merece Celso, pero no a ese precio. .Y eso no es todo, pues a una empleada de la Secretaría de Cultura del Gobierno fosfo fosfo, se le ocurrió imponerle el mote a Celso Piña de “El Cacique de la Campana”… Su raza, la raza vallenata,  la que le llora todavía a Celso anda más que ofendidísima con eso.

Como dijeran allá en el rancho, si no le ayudan al Gobierno y al Gobernador, pues que no le estorben.