Los números que señalan las autoridades estatales y responsables de la Salud en Nuevo León por el Coronavirus, innegablemente ''revelan'' la radiografía de un paciente muy enfermo.

Según el dictamen, que no es nada envidiable, lamentablemente admite que los indicadores se mantienen a la alza, los fallecidos, los internados, los intubados, etcétera.

Y, el tope máximo de los contagios que parece cohete en pleno vuelo, no dibuja ni idea de para cuando habrá de llegar al tope o la meseta como dicen, para empezar su descenso.

Pero lo peor de ello es, que parece ser que no hay recursos que alcancen y mucho menos la mínima cantidad de camas y ventiladores disponibles, para atender la crisis.

Así que ya se imaginará cómo se podrán poner las cosas, si se estima que en cuestión de días o mejor dicho de horas, sin querer especular, se anunciarían nuevas restricciones.

Las modalidades para el regreso escolar, presencial, a distancia e hibrida, sirve como ejercicio para dejar en claro el temor del respetable a ser contagiados o que alguno de sus seres queridos tenga Covid-19.

De lo contrario cómo se podría explicar que tras la reunión de las autoridades, la consulta con especialistas y expertos, la gran mayoría termine por las clases a distancia y una proporción mínima, se determine de manera oficial por las clases presenciales con harto cuidado.

Y, lo cuál por supuesto, está sujeto a la suspensión de clases en caso de reportarse contagios del Coronavirus, con horarios más que recortados y con un número muy reducido de alumnos para evitar cualquier riesgo.

Con índice de fuego, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón fue más que enfático contra los empresarios del transporte y más con quienes anden por la libre en eso del aumento camionero.

Que en lo que queda de su gestión, no permitiría que se aumente el transporte público, por lo que habrá de descartarse el ''tarifazo'' a la brava y quien así lo haga ''pagará las consecuencias''.

Así que ahora habrá que ver de qué tamaño es el correctivo para quienes ya le andaban poniendo muy alta la canasta a los usuarios del transporte público en general, aumentando las tarifas. Ah, raza.

Pero ojo, porque los empresarios camioneros insisten en ponerle saliva a la bola con eso del aumento a las tarifas.

Por lo que ya la andan haciendo de tos a los cuatro vientos otra vez, bajo el argumento de que no les sale ni para los gastos.

Más no explican si continuarán sacando unidades del transporte de circulación, causando las grandes aglomeraciones.

Waldo Fernández se pronuncia por la paridad en el Palacio legislativo, donde pronto habrá de tomar protesta como integrantes de la bancada morenista.

Pero hay que seguirle la huella, porque sin lugar a dudas, su propuesta sea real y de fondo, pues no quiere que esto sea nada más por encimita.

Y, que en el caso de la bancada por la que formará parte cambiando la estafeta, es precisamente una mujer quien asume la coordinación.

Y, que en el caso de Waldo, señala la importancia de abrir el espacio a la mujer no nada más en el papel, sino al parejo en todas las áreas de Congreso.

Vaya, que la tarea de posiciones importantes del mismo modo se le otorguen a las damas, para predicar en el Congreso con el ejemplo y no de pantalla.