banner edicion impresa

Opinión Editorial


La UNAM, el neoliberalismo, los exrectores y el Presidente…


Publicación:31-10-2021
version androidversion iphone

++--

El Presidente no debe mentir al iniciar un debate. Mancha la investidura presidencial cada vez que hace eso

Coincido con el exrector de la UNAM (1999-2007), Juan Ramón de la Fuente, que hace unos días, en entrevista con EL UNIVERSAL dijo que la Universidad es un espacio en donde se pueden analizar y debatir todas las ideas y todos los puntos de vista, incluida, por supuesto, la crítica.

Esto manifestó el embajador de México ante la ONU: "El Presidente, que es egresado de la UNAM, nos ha invitado a polemizar; hagámoslo sin hacerle el juego a quienes sólo buscan el escándalo público". Se trata, agregó, del punto de vista del Presidente pero también de un exalumno de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, que es válido y que desde luego tiene todo el derecho a ser expresado y escuchado.

Luego: "El espíritu crítico forma parte de la naturaleza de la Universidad. De hecho, revisar periódicamente, con ojo crítico y autocrítico, lo que hacemos o dejamos de hacer los universitarios es una práctica frecuente que no debe abandonarse. Y el pensamiento crítico, el derecho a la crítica y la tolerancia a las opiniones diferentes, son valores propios de la vida universitaria que se deben preservar y alimentar".

Después: "La libertad de cátedra es una fortaleza que forma parte de la diversidad institucional. Unidad en la diversidad, es lo que significa la palabra 'universidad'. La esencia de la universidad es precisamente la universalidad del pensamiento, por lo que es y debe seguir siendo el foro donde caben y se debaten todas las ideologías y las posiciones políticas. Y es en ese sentido que la libertad de cátedra es primordial".

Reitero: coincido con todo lo dicho por De la Fuente. Tolerancia, libertad, inclusión, pero… quien participe en esos debates entre los universitarios me parece que debe ceñirse a una argumentación que esté sustentada en datos duros, en razonamientos que tengan el respaldo de hechos.

Un destacado hombre universitario, que ha estado bastante cerca del Presidente a lo largo de los últimos años, me dijo hace un par de días: "En esto está mal informado el Presidente, está mal aconsejado".

Pues ojalá lo vaya a ver a Palacio Nacional (ojalá lo reciba) y él le pueda dar un panorama objetivo, equilibrado, y sustentado en hechos de lo que sucede en la UNAM, porque he platicado estos días con muchos universitarios y las expresiones del Presidente no cayeron bien a quienes durante años han luchado desde la izquierda, desde posiciones progresistas y liberales, para que la Universidad se mantenga a la vanguardia, tal como hoy lo está. ¿A quién en la izquierda le puede gustar que le digan que se derechizó, que se "hamburguesó", que sirve a élites neoliberales y conservadoras, que ya no tiene convicciones sociales?

El Presidente no debe mentir al iniciar un debate. Mancha la investidura presidencial cada vez que hace eso, como lo hicieron muchísimas veces los priistas y los panistas que estuvieron en Los Pinos. Andrés Manuel López Obrador dijo una y otra vez que la UNAM nunca cuestionó ni criticó la época neoliberal. Es falso. Como bien redactó el colega Daniel Francisco, que entrevistó al secretario general de la Universidad, Leonardo Lomelí (https://bit.ly/3EqWoyI), la UNAM fue una de las primeras instituciones que advirtió sobre el cambio de rumbo de la economía mexicana y acerca de las implicaciones del modelo neoliberal para México. Y eso se respalda con datos duros: hay un amplio repertorio de publicaciones, unos 120 libros sobre el tema, que analizan el neoliberalismo, y no solo eso, son textos que también plantean alternativas a los problemas que ha generado el neoliberalismo, tal como lo señaló Lomelí Vanegas.

A nadie conviene un enfrentamiento entre el Presidente y la UNAM. A nadie. Ojalá en la 4T dejen a los universitarios continuar con su vida autónoma sin injerencias desde el poder. Y ojalá que cualquier debate que haya en lo sucesivo sea a partir de hechos, de datos duros, y no de descalificaciones provenientes del dogma. La verdad…



« Juan Pablo Becerra-Acosta »