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Opinión Editorial


El chiriguillo y el claque


Publicación:10-05-2024
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En el colmo de la perversión o la ingenuidad política quieren que algunos candidatos no obtengan la victoria, contradiciendo la intención del patrón

El candidato a la alcaldía de Juárez por Movimiento Ciudadano, Félix Arratia, con voz de flauta que no escuchan los habitantes y características físicas y morales propias del Jurassic Park se cree muy salsa y hasta cree que va a ganar la alcaldía aunque no ha gastado ni pequeña parte de los 90 millones de pesos que le dieron para la campaña.  

Ni siquiera porque tiene rasgos físicos compartidos por muchos habitantes del municipio, procedentes de estados del sur del país, Oaxaca, Puebla, Tlaxcala, San Luis Potosí, ha podido cautivar o convencer a sus electores. Arratia confía en que va a ganar porque trabajó en el despacho del papá del gobernador Samuel García Mascorro y conoce bien a bien los procedimientos del proceso facturero. Habrase visto. Manipula su complicidad para sacar raja.

Eso confirma su baja calidad moral. Y por eso fue escogido como candidato, su turbio pasado lo recomienda. Le cae mal a la gente que visita si es que la visita, no tiene estructura electoral y desconoce como armarla, ha seleccionado a representantes de casilla a los que ha prometido 1,500 pesos por jornada que seguramente no pagará y ha hecho equipo con Mario Salinas e Irene Garza candidatos a diputados que con seguridad no ganarán. 

Y por el estilo se encuentra el tristemente célebre Luis Donaldo Colosio que busca una senaduría después de haber hecho tanto daño a Monterrey. Daño que seguramente incrementará como Senador. Primero por no hacer nada: ni bajó los índices de violencia y delincuencia, ni incrementó los acervos bibliográficos de la red municipal de bibliotecas ni tapó baches; y segundo, porque lo que hizo fue contraproducente para los regiomontanos: tapar calles y avenidas. Ignorante, causó un gran daño al Arco de la Independencia, en Madero y Pino Suárez, uno de los monumentos con más historia en Monterrey.        

Luis Donaldo está al lado de Martha Herrera en la fórmula para el Senado. Pobre Martha no sabe lo que le espera: una inminente derrota, no por ella sino por haber aceptado ir con Colosio. Martha se ha dado cuenta de que a donde va, no conocen a Colosio. Lo que la gente sabe de él es por su asesinado padre. Donde quiera se lo mencionan. Pobre tipo: vivir de un padre muerto. Es decir, no tiene méritos por sí mismo. No tiene simpatía. Es un Arriata. No convoca al voto. Pero Colosio será Senador, pues va en la lista plurinominal, pero Martha Herrera no. Pero no deja de ser un claque, el que aplaude por interés egoísta.

No todos los candidatos portan buenas recomendaciones. Ahí está Miguel Angel Sánchez, el dirigente estatal de Movimiento Ciudadano, candidato a diputado local por la vía plurinominal. Es un asesino. El expediente Capullos está abierto. Y es un misógino. Y curiosamente, Sánchez apoya tanto en dinero como en promoción a Félix Arratia y a Luis Donaldo Colosio. No cabe duda, Dios los hace y ellos se juntan. 

Son tan obtusos que emprenden campañas negativas, difamatorias y sucias contra militantes y candidatos de su mismo partido. En el colmo de la perversión o la ingenuidad política quieren que algunos candidatos no obtengan la victoria, contradiciendo la intención del patrón de todos, Samuel García, quien desea un Congreso naranja para avanzar en sus programas y proyectos.



« Arnulfo Vigil »