Dicen que el hambre es canija y más el que la aguante, sin embargo pese a ello las diferencias políticas en Nuevo León no terminan, por lo que el Estado afirma trabajar con ''las uñas''.

Y, todo según el propio gobernador Samuel García por no tener el presupuesto del presente año aprobado, por lo que culpó de ello a los legisladores del Congreso local o lo que es lo mismo PRIAN.

Por lo que los pleitos y diferencias que guardan desde que se pelearon por la designación de Adrián de la Garza como fiscal general de Justicia en NL los tiene y tendrá entrampados.

Pues es fecha, que ninguna de las dos partes en conflicto, el gobierno del Estado, ni los legisladores locales del PRIAN, han dado su brazo a torcer y como diría Don Tiofilito...

Y, aunque cualquiera en su sano juicio se ha manifestado por fumar la pipa de la paz y sentarse a negociar, no dejan de aflorar los motivos por las que se separan y así seguirán.

Por cierto hablando de aguacates, los representantes de la iniciativa privada ya se pronunciaron por pacificar las broncas políticas en Nuevo León y no tuvieron eco.

No es la primera vez que ''los ipecos'' alzan la voz exigiendo evitar las diferencias, porque ya palpan afectaciones en sus diversas áreas, por lo que vale parar oreja.

Sin embargo, ni de gobierno estatal ni del palacio legislativo hubo réplica en ese sentido, lo cuál sin lugar a dudas, deja mucho que desear, porque del arreglo, ni sus luces.

Como lo adelantamos en éste espacio, el jefe policiaco Gerardo Palacios Pámanes hizo fuertes comentarios sobre las declaraciones de las autoridades responsables de los derechos humanos en NL.

Sobre todo, ante el seguimiento de recomendaciones de presuntos abusos policiacos, que estaban en el archivo muerto, bien guardaditos y que corresponden a la gestión pasada.

Por lo que el dato, quieran o no, se presta sin lugar a dudas, a toda clase de sospecha y más en tiempos en que las diferencias políticas siguen involucrando instituciones locales.

Y, que a pesar de que el secretario de seguridad pública en Nuevo León le sigue sacando la vuelta a los asuntos ''políticos'' no falta quien quiera llevárselo al baile. Ah, raza.

Si los pronósticos de lluvia se cumplen en los próximos días o mejor dicho, en las próximas horas, muchas cosas podrían cambiar para el Estado de Nuevo León.

Para empezar, para bajarle al riesgo de los incendios previo a las vacaciones de Semana Santa y tal vez en lo sucesivo, por lo que vale poner changuitos.

Y, en el mejor de los casos, poner todos los Santos de cabeza si es necesario, si en otras ocasiones se ha bailado la danza de la lluvia y hasta se ha invocado a Tláloc.

No vaya siendo que se nos haga el milagrito en estos días Santos y de Cuaresma, que en mucho ayudaría a las presas locales en su captación para mejorar el consumo humano.

No nos gusta el chisme, pero ahora que los alcaldes pidieron licencia para irse a hacer campaña, ni falta quien haga reclamos por los atorones viales por las obras sin terminar.

Por lo que quien sabe cómo les vaya a quienes se aventaron al ruedo o como dicen algunos, a la aventura, para buscar el voto del respetable para alcanzar la reelección u otro cargo.

Pero como no nos gusta el chisme, hasta ahí la dejamos, aunque eso sí, vale recordar que no sería la primera vez que el electorado se cobra la factura.