"Todos los aduladores son mercenarios, y todos los hombres de bajo espíritu son aduladores"

Aristóteles

Famosa fue en Monterrey, allá por los 60´s y 70´s, la "Comparsa de Roberto Zamora", un grupo musical exitoso que amenizaba bailes, fiestas y demás; su director, Roberto Zamora, fue mi maestro en la Secundaria 11 "Jaime Torres Bodet" y siempre le estuve agradecido de haber recibido la invitación para formar parte de su banda, aunque al final por diversos factores el tema no se concretó.

Pero hoy no me quiero referir a esas comparsas, como las que se forman en los carnavales, sino a los otros, los que sirven de "comparsa" o falso acompañamiento.

Me entero que el Senador con licencia y ex Gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, estuvo en Monterrey fingiendo, perdón fungiendo, como "corcholata" presidencial para presentar algunas de sus propuestas.

Sin convocatoria ni estructura, sin un evento fuerte programado, simplemente para cubrir el expediente, Velasco vino de turista a Nuevo León para convocar a los medios y soltar su perorata, que nada nuevo aporta a la vida pública del país o el Estado.

El otro "Niño Verde" propuso un mando único policial (oh que gran novedad) argumentando que le funcionó en sus tiempos de gobernador; sin embargo aquí las cosas son muy distintas y un modelo, por exitoso que sea, no puede ser simplemente "tropicalizado" para que funcione.

Además, planteó un gobierno de coalición, gimnasios al aire libre para evitar que jóvenes caigan en drogas, una agenda verde a favor del medio ambiente, programas de conservación de áreas naturales y programas para premiar a jóvenes que son buenos estudiantes con becas y titulación gratuita, así como apoyos para madres solteras.

No pos sí, como decía un amigo, excelentes propuestas.

Igualito está Gerardo Fernández Noroña, el petista, que fiel a sus costumbres hace "campaña" quejándose de todo, tirado en el piso, lloriqueando, pero sin aportar solución alguna a los graves problemas que enfrentamos como país.

Terminas por entender que tanto Velasco como Fernández Noroña son meras comparsas, malos actores de reparto y relleno.

Pero, ¿a quién beneficia su participación? Porque está claro que no tienen posibilidad alguna de convertirse en los candidatos de Morena y que participan en la contienda con el único objetivo de "abrir" o quitar votos a alguien, ¿a quién les enviaron restar sufragios?

Ambos se inscribieron con el único propósito de mantenerse vivos en la política, conseguirse un espacio en el futuro si quienes los contrataron llegan a ganar y hacerse acreedores a un cargo.

Las comparsas respiran oxígeno que otros necesitan, estorban, quitan tiempo y por tanto no deberían formar parte del proceso, porque están para restar y dividir, no para sumar y multiplicar.