Ayer, a la edad de 63 años de edad dejó de existir el empresario regiomontano Carlos Bremer, por complicaciones en su salud.

Su fallecimiento causó conmoción en general dada su múltiple actividad empresarial y filantrópica que le distinguió.

La triste noticia, llamó poderosamente la atención de todos los sectores de la sociedad incluidos el artístico y deportivo.

Vaya desde aqui nuestro más sentido pésame para la familia y los amigos del empresario Caros Bremer. Descanse en paz.

Pues será el sereno, pero todo hace indicar que las autoridades estatales, legislativas y municipales vivirán en éste Año Nuevo, Viejas Broncas.Tan es así, que amagan con protagonizar el cuento de nunca acabar.

Y, que en el peor de los casos, aparejarán sus respectivas actividades oficiales con cuestiones legales, que empantanarán sus asuntos y temas electorales casi casi llegando a las urnas.

Por lo que vale pelar el ojo y parar oreja, si se toma en cuenta que otra vez robarán cámara en asuntos espinosos el gobernador Samuel García, los diputados del PRIAN y los alcaldes del Pacto Nuevo León.

Que en el amanecer del presente año, el cuerpo juridico del Congreso local ya busca la forma de encarar las acciones oficiales en torno al presupuesto.

Sobre todo, cuando el gobernador Samuel García Sepúlveda, ya les dijo a los diputados que no habrá de piña, brincandose algunos pasos de cajón.

Aunque claro, el ejecutivo estatal valida sus acciones, minimizando toda crítica, bajo la advertencia de que él tiene otros datos. Ah, raza.

Como lo advertimos en este espacio, personas en situación de calle de un tiempo a la fecha han protagonizado incendios y quejas en Monterrey.

Y, que la agresiva actitud de las mismas ha causado una serie de quejas hasta de comerciantes establecidos, que se han visto afectados.

Sobre todo, en sus establecimiento por alterar el orden y presentar cúmulo de materiales en las puertas de algunos establecimientos.

Se cuenta que muchos de ellos, anteriormente fueron desalojados de sus viviendas improvisadas en el lecho del río Santa Catarina.

Especialmente, al atribuirse a ellos la gran cantidad de siniestros que se presentaron en cascada consumiendo muchas áreas de vegetación.

Sin embargo, parece que el problema se trasladó de un lugar a otro, por lo que habrá que tomar cartas en el asunto, si se quiere evitar tragedias.