Detienen a uno por asesinato de Eduardo Salomón

Un hombre fue detenido por el asesinato de Eduardo Salomón Puertos Gaytán de 16 años, a quien sujetos armados sacaron de su casa en Tlajomulco mientras cuidaba a sus hermanos, para después asesinarlo y abandonar su cuerpo en otra finca del mismo municipio. La mañana de este martes, el gobernador Enrique Alfaro informó sobre la captura del sujeto. Más tarde, mediante un video, el fiscal del estado, Luis Joaquín Méndez Ruiz, y la fiscal Especial en Personas Desaparecidas, Blanca Trujillo Cuevas, confirmaron la detención de un hombre involucrado con el asesinato que ya está a disposición del Ministerio Público, que busca reunir elementos suficientes para imputarlo y vincularlo a proceso. Trujillo Cuevas indicó que se han cateado tres fincas donde, aparentemente, estuvieron los asesinos de Eduardo Salomón y se mapeó el paso de los vehículos que utilizaron para poder saber a dónde se dirigieron. Indicó que el adulto encontrado muerto junto a Eduardo Salomón en una casa del centro de Tlajomulco ya fue identificado, pero no se dieron mayores datos. Tampoco se dio a conocer la identidad del detenido ni se explicó su participación en el asesinato o el móvil que motivó el crimen.

DESPIDEN A EDUARDO

La familia Puertos Gaytán despidió la mañana de este martes a Eduardo Salomón con una misa de cuerpo presente en el templo de la Inmaculada Concepción, en la Zona Valles de Tlajomulco, para después acompañarlo hasta el panteón. Por la mañana, integrantes de colectivos de búsqueda de personas se reunieron en la Glorieta de las y los Desaparecidos y marcharon hasta el Palacio de Gobierno, donde exigieron justicia para Eduardo y para todas las víctimas de desaparición en el estado. Cerca de un centenar de personas se plantaron frente a la sede del gobierno del estado con fichas de personas desaparecidas que pegaron en las puertas, ventanas y vallas que resguardaban el recinto

A NOÉ TAMBIÉN LO SACARON DE SU CASA EN JALISCO

Noé Alejandro Penilla Mares tiene 16 años y desapareció el 22 de julio de 2021, cuando un grupo de sujetos armados irrumpió en su casa para llevárselo a él, a su padre y a dos de sus hermanos; desde entonces, su madre, Verónica Mares Arévalo, los busca y ha tenido que hacerse cargo sola de otros cuatro menores de edad. Eran las nueve de la noche cuando varios sujetos armados llegaron en tres vehículos hasta la casa de la familia Penilla Mares, en el céntrico barrio de Santa Teresita, en Guadalajara; algunos se quedaron vigilando en la calle mientras otros entraron a buscar en la casa, asustaron a las mujeres y los niños, voltearon las camas y se llevaron a Noé, a sus hermanos Brian (19 años) y Javier (20), y a su papá, Miguel Ángel (45). "Estábamos todos ahí adentro, mi esposo estaba en la mera entrada arreglando la moto, mis dos hijos estaban en el cuarto y otro en un sillón. Llegaron y se metieron los encapuchados y los sacaron; yo estaba arriba en un cuarto con otra hija y sus tres niños, los encapuchados subieron y gritaron ‘¿dónde están los demás cabrones?’. Los niños estaban dormidos y los despertaron para voltear la cama y ver si no había nadie, no sé a quién más andaban buscando", relata Verónica. Cuando los sujetos armados salieron de su casa ella fue detrás y vio cómo subían a sus tres hijos y su esposo a un vehículo: "estaba asustada y pienso que si me hubiera metido para que no se los llevaran me hubieran dado un balazo, por eso no me puse agresiva, porque eso iba a ser peor". Noé trabajaba como ayudante en una panadería, Brian y su padre ayudaban en una oficina, Javier tenía empleo en una maderería; el mismo día que desaparecieron Verónica levantó la denuncia y dio a las autoridades algunas pistas de lo que pudo ocurrir, pues piensa que los sujetos estaban buscando a su hijo Javier, quien había tenido problemas con un vecino. Después de la desaparición, el resto de la familia de Noé tuvo que moverse por un tiempo y refugiarse con algunos parientes por miedo a que los sujetos armados volvieran para llevarse a alguien más; hasta ahora la Fiscalía Especializada en Personas

Desaparecidas asegura que ha realizado varias diligencias para dar con el paradero de los cuatro; sin embargo, nada ha ocurrido. "Yo no me voy a quedar así, pero también tengo miedo de que me puedan hacer algo, tengo más hijos y no quiero que le vayan a hacer algo más a mi familia, entonces estoy como atorada", dice la mujer. Verónica espera que los cuatro regresen con vida, piensa que los pueden tener cautivos en algún sitio y cree que, como ha sucedido en otros casos, los podrían liberar. Sin embargo, acude constantemente al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses por si aparecen los cuerpos.