Dan 127 años de cárcel a multihomicida en Guanajuato

CELAYA, Gto./EL UNIVERSAL.- Marco Antonio "N", alias "El Chitos", fue sentenciado a 127 años con ocho meses de cárcel por el asesinato del director de Seguridad Pública de Apaseo el Grande, Guanajuato, José de Jesús Salgado Martínez, en mayo de 2017, además del homicidio de dos hermanas gemelas y de su primo, los tres adolescentes, a quienes torturó y enterró en un corral. Un juez penal también dictó una sentencia de 30 años de prisión en contra de Raymundo "N", "El Ray", quien participó en el homicidio del comandante Salgado, cuando éste esperaba a su esposa afuera de su domicilio en la colonia La Huerta. El 27 de mayo de 2017, poco antes de las 07:00 horas, "El Chitos", como copiloto de un vehículo Trial Blazer, "El Ray", al volante y otro sujeto identificado como "El Cholo", se apostaron al exterior de un domicilio ubicado en la calle Aquiles Galindo, de Apaseo el Grande, a esperar que saliera el director de Seguridad Pública a llevar a su hijo a la escuela. Al ver que el comandante encendía su camioneta afuera de su casa, los agresores se le emparejaron y dispararon con armas largas, provocándole la muerte de manera inmediata, informó la Fiscalía General del Estado. Marco Antonio N, de 35 años, fue detenido el 6 de abril de 2020, y Raymundo "N", de 46 años, en octubre de 2018, por su intervención en el delito de homicidio calificado en agravio de José de Jesús Salgado. En otra causa penal, "El Chitos" fue encontrado culpable de asesinar a las gemelas adolescentes María Guadalupe y Carmen María y a su primo Heriberto, el 8 de junio de 2017. En abril del mismo año, una de las gemelas dijo a las autoridades haber sido testigo de la privación de la libertad y posterior homicidio de su pareja sentimental, por lo que fue amenazada de muerte por "El Chitos". La tarde del 8 de junio, las gemelas y su primo fueron privados de su libertad por “El Chitos”, en compañía de Raymundo "N", "El Ray", y otros dos sujetos, que las trasladaron en una camioneta pick up a un inmueble de la comunidad de San Pedro Tenango El Nuevo, en donde fueron sometidos a maltrato físico y psicológico. "A Heriberto lo tenían sentado en una silla mientras le apuntaban con un arma de fuego en la cabeza. Lo golpearon en repetidas ocasiones en el rostro hasta casi desfigurarlo. A las gemelas les ataron las manos por la parte de atrás de su cuerpo y las golpearon en rostro y abdomen.