Taiwan se planta

Taiwan se ha plantado con la Unión Europea: si no desbloquean las negociaciones comerciales entre la región y Taiwan, las empresas de desarrollo de chips taiwanesas no abrirán plantas para fabricarlos en territorio de la UE. Así lo aseguran desde Bloomberg, donde se hacen eco de una columna editorial publicada por la Agencia de noticias central de Taiwan, respaldada por el gobierno del país.

Esta reacción desde Taipei llega semanas después de que TSMC empezase las negociaciones para construir una planta de fabricación de chips en Alemania, en la que tendrá que invertir varios miles de millones de dólares. Según apuntan desde Taiwan, mientras que TSMC negocia con Alemania, la Comisión Europea ha rechazado la apertura de negociaciones sobre comercio e inversión con la zona. Aunque el parlamento de la región ha propuesto abrirlas.

De ahí el enfado de las autoridades, y como señalan en la columna de opinión mencionada, «la Unión Europea quiere que Taiwan construya plantas, pero para Taiwan no hay necesidad de hacerlo desde un punto de vista de empresa. Si la Unión Europea solo quiere chips de Taiwan pero quiere mantenerse al margen de otras conversaciones diplomáticas, ¿será Taiwan, con sus activos estratégicos globales, tan inocente como para hacerlo?«.

Desde la agencia también han criticado los comentarios recientes de un funcionario de la UE, que aseguró que para la Unión Europea no era necesario llegar a un acuerdo de inversión con Taiwan. Esta columna de opinión es un paso poco habitual del gobierno del Presidente Tsai Ing-wen, que normalmente adopta un tono amistoso cuando habla y se dirige a otros países, aunque no haya relaciones diplomáticas entre Taiwan y los principales países del mundo por la oposición a ello de China, que reclama que Taiwan es parte de su territorio.

Las tensiones entren los gobiernos de China y Taiwan han escalado desde que Estados Unidos aumentase la presión sobre China, con el objetivo de frenar su papel en la región de Asia. Paralelamente, el papel de Taiwan como principal fabricante de chips avanzados está disparando su situación estratégica.

Pero la región está buscando, de manera cada vez más insistente, profundizar las relaciones comerciales, así como otras más informales, tanto con Estados Unidos como con otros países occidentales. Por eso se está escudando en las negociaciones de TSMC en Alemania para intentar forzar a que la UE establezca relaciones comerciales con Taipei. En cuanto a la situación de las conversaciones entre TSMC y el gobierno alemán para la construcción de la planta de chips que quieren en el país, TSMC todavía está evaluando los planes de construcción de una planta de fabricación de chips en la Unión Europea, sin que haya tomado todavía ninguna decisión definitiva al respecto.