NVIDIA demandada por Valeo

NVIDIA se enfrenta a un litigio legal con la automovilística francesa Valeo después de que uno de sus ingenieros, Mohammad Moniruzzaman, mostrase por error los archivos de código fuente en su ordenador mientras compartía su pantalla en el transcurso de una videoconferencia en Microsoft Teams con ambas empresas durante marzo 2022. Este hecho probaría que el empleado habría sustraído ilegalmente secretos comerciales de su antigua empresa en beneficio de terceros.

Valeo y NVIDIA venían trabajando conjuntamente en un proyecto de tecnología avanzada de asistencia a la conducción y estacionamiento. Valeo se solía encargar tanto del software como del hardware de la tecnología de asistencia al estacionamiento del fabricante. En 2021, NVIDIA se hizo con el contrato para desarrollar su software de asistencia al aparcamiento, llevando a Valeo a iniciar los trámites legales de acusación.

En concreto, y tal y como recoge la denuncia presentada contra NVIDIA, Moniruzzaman robó 6GB de código fuente detrás del software de asistencia a la conducción y estacionamiento. Para Valeo saltaron las alarmas, pues precisamente NVIDIA viene trabajando en esta área específica.

Todo habría sido descubierto durante una presentación con diapositivas, de tal modo que al minimizar la aplicación que estaba usando dejó visible el archivo. El resto de participantes de Valeo no dudaron en realizar capturas de pantalla al reconocer inmediatamente el código fuente.

En la denuncia se detalla además que la ruta del archivo en su pantalla todavía figuraba como ´ValeoDocs´, lo que demostraría la acusación fehaciente contra el trabajador. Dichos gigabytes de datos habrían sido sustraídos, supuestamente, en 2021. Por aquel entonces, Moniruzzaman trabajaba para la filial alemana de Valeo y poco después anunció su marcha a NVIDIA.

El testimonio del principal acusado

La sentencia de las autoridades alemanas fue contundente, al declarar a Moniruzzaman culpable por posesión ilegal de datos en septiembre de 2023. Tras ser interrogado por la policía alemana, admitió haber sustraído el software de Valeo y emplearlo mientras trabajaba para NVIDIA. En ningún momento negó la acusación del crimen. Fue declarado culpable de violación de secretos comerciales y condenado a pagar 14.400 euros en concepto de indemnización.

La acusación contra NVIDIA

La automovilística gala asegura que NVIDIA ha conseguido ahorrar cientos de millones de dólares en costos de desarrollo y que ha generado una serie de ganancias partiendo de una información sobre la que no tenía los derechos. Se emplearon una serie de secretos comerciales de Valeo, reduciendo el valor de éstos. Aquí se incluyen decenas de documentos de Word, presentaciones de PowerPoint, archivos PDF y hojas de cálculo de Excel esenciales para el desarrollo del proyecto.

Ahora Valeo solicita una indemnización cuantiosa y espera que el tribunal emita una orden judicial que prohíba la utilización de su código de manos tanto de NVIDIA como de sus empresas filiales. La policía alemana confiscó todos los ordenadores en posesión de NVIDIA como parte de la investigación criminal abierta.

Otro documento presentado ha sido una carta que Valeo recibió de NVIDIA en junio de 2022. En la misma, los abogados que representan a NVIDIA afirmaban que las acciones de Moniruzzaman eran desconocidas para la empresa hasta mayo de 2022.

La defensa de NVIDIA

En base a esto, NVIDIA es clara y asegura que no era consciente que Moniruzzaman tenía los datos. En la carta comentada con anterioridad, la defensa de NVIDIA asegura que su empelado les dijo que el código estaba almacenado localmente en su ordenador portátil, por lo que otras personas de la empresa no podían acceder a él.

Además, NVIDIA se defiende asegurando en que no tienen ningún tipo de interés ni en el código de Valeo ni en sus supuestos secretos comerciales. De ahí que la tecnológica haya tomado medidas judiciales en el asunto para proteger los derechos reclamados, asegurando que en todo momento han cooperado plenamente.

Una competencia feroz en un mercado abierto

El mercado de la conducción autónoma avanza a un ritmo frenético y esto lleva a que las empresas luchen por ganar una posición preferente frente a sus adversarios. En 2017, Waymo acusó a Uber de aliarse con su ex empleado, Anthony Levandowski, para sustraer más de 14.000 archivos de diseño confidenciales y propiedad de la empresa. La sentencia fue contundente y el empleado fue condenado a 18 meses de prisión, aunque indultado seis meses después por el ex presidente de EEUU, Donald Trump.