Los smartphones tendrán que llevar baterías intercambiables
Esta nueva ley establece que los usuarios deberían ser capaces de sustituir una batería de su teléfono sin tener una experiencia especial para poder hacerlo.
Hace aproximadamente un mes que el Parlamento Europeo votó a favor de una nueva ley que, entre otras cosas, iba a requerir que las baterías de los dispositivos de consumo, como los smartphones, pudiesen sustituirse y extraerse del aparato con facilidad. Para que fuese realidad entonces, no obstante, faltaban algunos trámites para que la ley fuese aprobada de manera definitiva. Pero ya lo está, después de que el Consejo Europeo diese el visto bueno a esta nueva ley esta misma semana.
Esto implica, entre otras cosas, que los fabricantes de dispositivos tendrán que asegurarse de que todos los que quieran poner a la venta para 2027 en la Unión Europea tengan baterías que puedan sustituirse con facilidad. Solo queda que los representantes del Consejo Europeo y el Parlamento firmen la ley, lo que sucederá en unos días. A partir de entonces se abrirá un periodo de gracia hasta dicho año, en el que los fabricantes contarán con tiempo suficiente para rediseñar sus aparatos.
En concreto, esta nueva ley establece que los usuarios deberían ser capaces de sustituir una batería de su teléfono sin tener una experiencia especial para poder hacerlo, ni tener que utilizar herramientas para ello. Dado que casi todos los smartphones actuales están diseñados de manera que su cierre depende de un uso extensivo de adhesivos, loas bases sobre las que las empresas diseñan los smartphones tendrá que cambiar. Eso sí, todavía es muy pronto para saber cómo esta ley hará que cambien los distintos modelos de smartphones.
Además de esta norma, la ley lleva aparejados otros cambios en relación con la gestión de las baterías una vez se descartan. Así, los fabricantes tendrán que recoger el 63% de las baterías portátiles que terminan habitualmente en el vertedero para finales de 2027. Y para 2030, ese porcentaje tendrá que subir hasta el 73%.
También para 2027, la recuperación de litio de las baterías gastadas tendrá que ser del 50%, y para finales de 2031, del 80%. La ley no solo especifica que tendrá que recuperarse ese litio, ya que también establece que tendrá que prepararse y reciclarse para utilizarlo otra vez en baterías nuevas.
Las baterías para vehículos eléctricos y para uso industrial, entre otras, tendrán que fabricarse utilizando un porcentaje mínimo de contenido reciclado. En un primer momento, este porcentaje será del 16% para el cobalto, del 85% para el grafito, y del 6% para el litio y el níquel. Además, para finales de 2025, las baterías de níquel-cadmio tendrán que tener un objetivo de eficiencia de reciclado del 80%, mientras que el resto de baterías deberían contar con un objetivo mínimo de eficiencia del 50%.
Teresa Ribera, Ministra de Transición Ecológica de España, ha manifestado que «las baterías son claves para el proceso de descarbonización y para el cambio en la UE hacia medios de transporte de cero emisiones. Además, las baterías que han llegado al final de su ciclo de vida contienen muchos recursos valiosos, y debemos ser capaces de reutilizar materias primas críticas en vez de depender. de terceros países para suministros. Las nuevas reglas promoverán la competitividad de la industria europea, y asegurarán que las nuevas baterías son sostenibles y contribuyen a la transición verde«.