Monitor Software
Inteligencia artificial para recrear personas muertas
Publicación:22-02-2024
TEMA: #Software
La inteligencia artificial para recrear personas fallecidas se presenta como una nueva forma de superar el duelo. ¿Pero sirve o es contraproducente?
La inteligencia artificial ha pasado de parecer un invento de ciencia ficción a convertirse en una herramienta muy útil en multitud de entornos profesionales y, de ahí, a encontrarse disponible para toda la población. Ese temido momento en el que la IA cause despidos de trabajadores ya ha llegado con algunos dobladores de cine o ilustradores y esto no ha hecho más que empezar. Ya hemos visto la doble cara de este tipo de algoritmos, una más amable y otra más hostil. Pero en algunos casos no está tan claro. Hay aplicaciones que para unas personas pueden parecer una bendición, mientras que para otras no hace más que ocasionar problemas. Es el caso de los algoritmos de inteligencia artificial para recrear a personas fallecidas.
Esto se ha convertido en todo un hito en los últimos años. Se ha hecho de todo. Por un lado, existen compañías que, de un modo más bien lúdico, utilizan la inteligencia artificial para fabricar ouijas virtuales, que permiten a los usuarios comunicarse con personajes históricos que ya pasaron a mejor vida. En cambio, también hay empresas que han utilizado la IA para que sus clientes puedan comunicarse con seres queridos fallecidos.
En las últimas semanas hemos visto en redes sociales dos ejemplos muy concretos. Por un lado, el de uno de esos experimentos sociales que realizan en el programa El Hormiguero, de Antena 3. En él, se hizo un llamamiento a personas que hubiesen perdido a algún familiar y conservasen grabaciones de audio con su voz. A continuación, se les permitió hablar con ellos.
Por otro lado, se ha compartido mucho el vídeo de una madre de Corea del Sur que pudo abrazar a su hija pequeña fallecida mediante realidad virtual. Hay quien defiende que esto puede ser beneficioso de cara al duelo, pero esta posición tiene muchos detractores, que opinan que lo hace mucho más complicado. Ahora bien, ¿qué es lo que opinan los profesionales? En Hipertextual hemos hablado sobre ello con el psicooncólogo Miguel Mediavilla. Pero antes de conocer su opinión, ¿hasta dónde está llegando la inteligencia artificial para recrear a personas fallecidas?
La historia de la inteligencia artificial para recrear a personas fallecidas
En 2016, el periodista tecnológico James Vlahos recibió una muy mala noticia. Su padre tenía un cáncer de pulmón en fase muy avanzada, que le causaría la muerte en poco tiempo.
Tras recibir este golpe, corrió a reunir toda la información posible de su ser querido. Grabó notas de audio de su padre hablándole sobre su vida, desde su infancia hasta la actualidad. Así, cuando ya no estuviese, podría tener un recuerdo suyo. Tras la muerte de su padre, transcribió las notas de voz, que ocuparon más de 200 páginas. Podría haber sido un bonito recuerdo, pero no se quedó ahí. Con el tiempo necesitaba algo más. Quería estar más cerca aún de alguien que ya no estaba, pero confiaba en la tecnología para conseguirlo. Así, decidió crear "dadbot", un chatbot entrenado con las grabaciones de su padre, que le permitía comunicarse con él cada vez que quisiera.
Él sintió que su invento le ayudaba, por lo que pensó que podría ser útil para otras personas. Así nació Here After AI, una compañía que utiliza las grabaciones de voz de personas fallecidas para que sus familiares puedan conversar con ellas. Poco después surgió Story File. En este caso se usan grabaciones de vídeo, en muchas ocasiones grabadas deliberadamente por la persona que sabe que va a morir pronto o que simplemente quiere dejar todo preparado, igual que se hace con un testamento. Todo esto ha permitido crear lo que se conocen como "avatares de historia de vida", unas reproducciones digitales de un individuo, que siguen viviendo una vez que este ya no está.
Poca utilidad frente al duelo
Algunos creadores de este tipo de tecnologías, como el propio Vlahos, las idearon por una buena causa. No obstante, se teme que a medida que se perfeccionen surjan empresarios que se aprovechen del dolor de las personas en fase de duelo, para que paguen una y otra vez con tal de volver a ver o hablar con sus seres queridos.
Además, ese no es el único riesgo de usar la inteligencia artificial para recrear personas fallecidas. Directamente, podría no ser muy útil para avanzar en el duelo. "El duelo es un proceso de adaptación a la pérdida en el que el doliente aprende a convivir con la ausencia de la persona querida fallecida y uno de los mecanismos de ese proceso es la habituación", señala Miguel Mediavilla. "Uno de los hechos con los que una persona en duelo tiene que aprender a convivir es, precisamente, con la imposibilidad de mantener una conversación con la persona fallecida".
Este es un dato importante, aunque el psicólogo hace una puntualización. "No es que no podamos hablar con ella", relata. "Hablar con las personas fallecidas, de hecho, es habitual y saludable en el duelo". Forma parte del proceso natural. De hecho, podemos ver muchos ejemplos representados en distintos formatos a lo largo de la historia. Incluso hay una frase de Irene Vallejo que, según el psicooncólogo, define muy bien la utilidad de estas conversaciones: "Hablar con los muertos es algo menos que una conversación, pero mucho más que un monólogo".
Entonces, ¿cuál es el problema de la inteligencia artificial para recrear personas fallecidas?
El problema es que aquí tenemos la falsa sensación de hablar con esa persona fallecida, cuando en realidad no hay nada de ella detrás de esa voz o esa imagen. Esa parte reconfortante de hablar con los fallecidos sin esperar respuesta, como en la cita de Vallejo, desaparece, creando una falsa ilusión de cercanía que puede retrasar el fin del duelo o incluso cronificarlo.
"Esta aplicación podría congelar, cronificar el duelo o interrumpir el proceso natural del mismo precisamente por impedir ese proceso de habituación. En principio me parece, por lo tanto, una herramienta innecesaria para la inmensa mayoría de las personas en duelo, que, además puede ser perjudicial para un número importante de ellas. Creo que solo debería utilizarse en un contexto clínico, bajo supervisión de un profesional y para circunstancias muy concretas. Circunstancias que, por otro lado, se pueden trabajar de otras maneras".
Miguel Mediavilla, psicooncólogo
¿Y si aun así queremos probar?
Miguel Mediavilla señala que uno de los problemas con los que nos encontramos en nuestra sociedad es el tabú que hay detrás de la muerte. "Nos cuesta mucho hablar de la muerte, de hecho, preferimos actuar como si no existiera o como si nunca nos fuera a llegar", explica. "Por ejemplo, confundimos con frecuencia conceptos como duelo y luto, que no son intercambiables".
Es por esto que considera que, quizás, la única ventaja del uso de inteligencia artificial para recrear a personas fallecidas sea que nos ayude a pensar algo más en la muerte.
Ahora bien, ¿qué pasaría si alguien insiste en utilizar estos algoritmos? Según el psicooncólogo, sería beneficioso hablar con esa persona y mostrarle comprensión. Pero también mencionarle las alternativas que existen.
"Lo primero que le diría es que se plantee por qué quiere usar la IA y si realmente la necesita para conversar con la persona fallecida. Si la necesita, por ejemplo, para decirle que le quiere o pedirle que le perdone por alguna cuestión concreta o para comentarle lo mucho que le echa en falta. Le diría que si lo que busca son respuestas piense que no le va a contestar esa persona que tanto quería, sino una máquina clonando su voz. Y que le va a decir, probablemente, lo que quiere oír. Además, si la respuesta no fuera la esperada, el dolor puede ser aún mayor."
Miguel Mediavilla, psicooncólogo
Por eso, "les diría a esas personas que si lo estiman oportuno soliciten acompañamiento profesional en duelo". Por ejemplo, en la Asociación Española Contra el Cáncer, donde Mediavilla trabaja, ofrecen este tipo de servicios. Pero no es la única institución que lo hace.
Ante un duelo que no somos capaces de superar, la clave está en buscar a profesionales. Hablar con la voz o la imagen de esa persona que ya no está puede parecernos reconfortante en un principio, pero probablemente nos deje un hueco aún mayor después. La inteligencia artificial puede hacer nuestra vida más fácil. Pero, en lo referente a la muerte, desgraciadamente, no hay soluciones milagrosas que nos hagan ahorrarnos unas lágrimas. Lo que parece que nos cerrará la herida, podría hacer que se abra mucho más.
« Especial »