Se fortalece el INE, pero piden mejor capacitación

Una de las aportaciones que dejó el proceso electoral del pasado 6 de junio a nivel nacional es el fortalecimiento del Instituto Nacional Electoral, aunque algunas deficiencias en los procedimientos dejaron entrever la necesidad de profesionalizar los cargos de los funcionarios de casilla, en opinión de académicos de la Universidad de Monterrey.

Otros de los elementos positivos en el balance, de acuerdo con los politólogos, fue la participación ciudadana de alrededor del 51 % que se registró –mayor a las anteriores elecciones intermedias– y haber superado el reto de las restricciones y las medidas sanitarias impuestas por la pandemia.

José Fredman Mendoza Ibarra y José Luis Berlanga Santos, profesores de la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales; y Ana Gabriela Sáenz Barrera, coordinadora del grupo Acción Cívica Interuniversitaria en la UDEM, participaron en la Mesa de análisis poselectoral: la nueva configuración política en México, que se desarrolló en un formato virtual, la tarde del pasado jueves 10 de junio.

El panel fue organizado por la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales de la UDEM, en el que también estuvo presente Patricia Fernández Guajardo, directora del programa académico de la Licenciatura en Ciencia Política y Gobernanza, mientras que la alumna Karina Guzmán fungió como moderadora.

En una de sus intervenciones, Berlanga Santos destacó que el papel del INE en las pasadas elecciones fue, sin duda, muy importante y que salió fortalecido, a pesar de haber sido cuestionado, tanto por el gobierno federal como por Morena, con el argumento de que era un “árbitro sesgado”, muy favorable hacia la coalición opositora, por lo que se habló de regresar el proceso electoral a la Secretaría de Gobernación y hacer una gran reforma.

"Lo que vimos el domingo es la capacidad enorme que tiene para organizar elecciones, que es básicamente su función (…) (pero) los importantes dentro del INE son las y los ciudadanos comunes y corrientes”, expuso.

“Ellos fueron nuestros héroes o heroínas el domingo, el clima estaba horrible y en esas condiciones estuvieron trabajando 12 horas; merecen todo el respeto y la admiración: son la joya de la corona de la democracia mexicana; (el INE) sale muy bien evaluado y creo que incluso el gobierno se va a olvidar de seguir con esta idea de cambiar al INE”, sostuvo.

El profesor de la UDEM enfatizó que, en esta edición, la organización de esta jornada de sufragio implicó un “reto enorme” debido a la pandemia, porque pudo haber inhibido la participación de los ciudadanos en algún porcentaje.

Por otro lado, indicó que, históricamente, las elecciones intermedias han sido menos concurridas que las presidenciales, pero este año superó la marca del 50 %, lo cual fue positivo.

Mendoza Ibarra, en su participación, señaló que, en estas elecciones, estuvo en juego la consolidación de la democracia, aunque “nadie se cuestiona si México es o no es democrático”, sin embargo, “es importante hablar ya de algunos institutos de profesionalización”.

“En Nuevo León, hubo casillas que abrieron a las 11 de la mañana; algunos funcionarios no van el día de la elección; los mismos representantes de los partidos están viendo quién da más: ‘yo estoy con uno, pero al final otro me da más, me voy con el otro’, se convierten en mercenarios; al final del día, eso va afectando la calidad en el proceso democrático”, explicó.

El catedrático manifestó la importancia de que el INE sea un organismo ciudadanizado, pero insistió en la creación de un instituto de capacitación que profesionalice a la ciudadanía que participa en las elecciones.

“No podemos negar que hay muchas fallas en el proceso mismo, en ocasiones, voluntarias, y en otras ocasiones, no tanto, porque son tan largas las jornadas; entiendo que hay capacitación, pero son cada vez que hay elecciones, espero que esos sean procesos más institucionalizados”, comentó.

Mendoza Ibarra afirmó que la consolidación de la democracia solamente se va a dar en la medida en que se institucionalice el sistema de partidos, y esto no puede llevarse a la realidad sin un órgano electoral institucionalizado: “el INE va para allá, a los partidos les hace falta; mientras los dos vayan trabajando en conjunto, la consolidación democrática se dará”.  

Sáenz Barrera, por su parte, hizo notar que Nuevo León ha marcado la pauta de todo lo que se tenía que hacer en el tema de marketing político: “en todo el país se habló de lo que se hizo en Nuevo León”.

“Más allá de las coyunturas, dio mucho de qué hablar a lo largo del país, se esperaba que hubiera una atención en Nuevo León, pero no se esperaba que fueran cosas particularmente novedosas, sino que solamente iba a ser una lucha de guerra sucia, porque así pintaba por los personajes que estaban en el escenario”, detalló.