Campo AgroExperimental del Tec premiado por producción lechera

El Campo Agro Experimental (CAETEC) del Tecnológico de Monterrey campus Querétaro recibió dos premios de Holstein por su producción lechera basada en la gestión eficiente y el otro por el uso de la tecnología. 

El primero fue otorgado a "La Patrona", una vaca Holstein de 12 años que alcanzó una producción acumulada de 125,011 kg de leche en 3,093 días distribuidos en ocho lactancias.  

El segundo premio correspondió a la eficiencia en producción lechera, posicionando al CAETEC en quinto lugar a nivel nacional y en el segundo lugar a Nuevo León en la categoría de tres ordeños.  

"Esta producción proviene de un hato de 186 vacas. Esto habla del potencial genético de cada una de ellas", mencionó la veterinaria del CAETEC Guadalupe López.  

Los premios fueron otorgados por la Asociación México Holstein, que a su vez regula y premia la calidad de la producción lechera en el país, evaluando una variedad de factores. 

"La asociación mide la producción de leche, la calidad (grasa y proteína) y la reproducción. Y respecto a esto, se generan los premios", explicó. 

"Esta vaca, pasó de una ordeña tradicional a una robotizada. Tenía mucha adaptabilidad y ese es uno de los reconocimientos. No todos los establos llegan a tener vacas tan longevas", mencionó la veterinaria. 

Un alto nivel de producción por el manejo de variables 

La operación del Campo Agro Experimental se basa en diversas variables que interactúan para optimizar la producción.  

Entre las principales variables destaca la alimentación, que en palabras de Arturo González de Cosio, director del CAETEC, representa aproximadamente el 70% de la operación.  

Cada vaca recibe una dieta balanceada, diseñada específicamente para maximizar su salud y rendimiento.  

"La calidad en la alimentación se evalúa todos los días. Esto incluye la cantidad y calidad de grasa, proteína y forraje. El seguimiento a la dieta es el 70% de la operación", explicó Arturo. 

Aparte de la alimentación, otro 20% se debe al manejo de la salud, especialmente a la salud reproductiva. 

"Esta producción proviene de un hato de 186 vacas. Esto habla del potencial genético de cada una de ellas".- Guadalupe López.

"Al menos un tercio de nuestro establo está gestando. Nosotros tenemos un parto cada 2 días en promedio", mencionó Arturo. 

Finalmente, un 10% se le atribuye al trabajo del equipo humano que maneja las operaciones diarias, si bien el equipo tiene un papel importante, Arturo señala que el trabajo de las vacas es el más significativo. 

"Todo lo que hacemos nosotros como seres humanos alrededor de esas vacas es pequeñito a comparación de todo el trabajo que hacen esos animales", comentó. 

Para María del Rocío De Alba coordinadora académica y de relaciones del CAETEC, estos logros son resultado de un trabajo de equipo, este esfuerzo colectivo abarca diferentes disciplinas y se enfoca en la mejora constante en todos los aspectos de la operación.  

"Uno de los retos más significativos es lograr que todo el equipo funcione como un engranaje sincronizado, para avanzar juntos al mismo objetivo", comentó Rocío De Alba. 

Una ordeña robotizada 

La tecnología también juega un rol importante, el uso de robots permite un ordeño individualizado basado en las necesidades fisiológicas de cada vaca, lo que optimiza su producción y reduce el estrés.  

"La producción de leche ha venido evolucionando en distintos tipos de ordeños tradicionales. Hoy en día se ordeña a una vaca por medio de un sistema robotizado y que depende de las necesidades fisiológicas de cada uno de los animales", mencionó Guadalupe. 

Este sistema automatizado de ordeño está disponible las 24 horas del día y permite que las vacas sean ordeñadas en el momento más adecuado para ellas. 

"Buscamos que el ordeño sea en el mejor momento para el animal. El robot te permite ir al ritmo de cada vaca", explicó Arturo. 

Adicionalmente, el manejo individualizado del bienestar animal asegura que las vacas se mantengan saludables y con un rendimiento constante.  

"A diferencia de un establo tradicional en el que se manejan grupos de vacas, el Tec de Monterrey voltea a ver individuo por individuo", comentó. 

Sobre la Asociación México Holstein 

La Asociación México Holstein regula y reconoce los estándares de producción lechera en el país.  

Sus evaluaciones consideran parámetros como la cantidad de leche, el contenido de grasa y proteína y la salud reproductiva de las vacas. 

Por otro lado, la genética en el trabajo de la asociación lleva un seguimiento riguroso de la descendencia de los animales.  

El seguimiento de la línea genética y los resultados productivos de generaciones pasadas es clave para identificar los mejores animales y asegurar la calidad en la leche.  

"Lo que nos interesa saber es quiénes son las madres y las abuelas de los animales. Y la asociación se enfoca justamente en identificar los mejores animales", concluyó González de Cosio.