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Alejandro Martínez, exatec comprometido con el ambiente

Alejandro Martínez, exatec comprometido con el ambiente
Comprometido con el medio ambiente, Alejandro creó una empresa de energía solar en Estados Unidos

Publicación:01-10-2022
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El exatec de la PrepaTec campus Chiapas, siempre mostró interés en el medio ambiente y la energía solar como solución al calentamiento global.

Graduado del Tec de Monterrey campus Monterrey de la carrera de Ingeniería, electrónica y computación, residiendo en Estados Unidos y con 54 años de edad, Alejandro Martínez Muñóz fundó su propia empresa de energía solar.

El exatec de la PrepaTec campus Chiapas, siempre mostró interés en el medio ambiente y la energía solar como solución al calentamiento global.

Es por esto que, desde hace 3 años, Alejandro funge como propietario de SolarES LLC, una empresa con ADN mexicano que procura la sustentabilidad. 

SolarES: Energía renovable de Chiapas para EUA

La historia y trayectoria de Alejandro hablan de alguien que, a base de esfuerzo y trabajo constante, ha retribuido a la sociedad con su pasión y emprendimiento.

Como él mismo menciona, su interés en las energías renovables nació del deseo de ayudar a restaurar el daño ocasionado al medio ambiente; de esto se trata SolarES.

“Cada vez que vendo un sistema de energía solar siento que estoy contribuyendo a limpiar el planeta de la contaminación, esa es la razón por la que me gusta”, añadió Alejandro.

Desde hace 3 años, la empresa familiar que fundó Estados Unidos, tiene como objetivo promover y vender soluciones de energía sostenible a corporaciones y particulares que ayuden a combatir la problemática del calentamiento global.

“Adopté una filosofía de trabajo de carácter global y no nacional. Me convertí en un ciudadano del mundo, dispuesto a ser un agente de cambio”, confirmó Alejandro.

SolarES nació tras la culminación de una maestría en energías renovables por parte de nuestro protagonista, misma que lo impulsó e inspiró en construir su sueño.

En búsqueda de la superación

Poco después de graduarse, Alejandro se mudó a Dinamarca, Copenhague, debido a una oferta laboral. Su primera incursión laboral en el país europeo fue la empresa de electrónica Philips.

“Cambiar constantemente mi método de trabajo, reinventándome cada vez, me ayudó a ajustarme a las necesidades de la empresa”, mencionó Alejandro.

Por diversas razones, tras un año fuera del país, Alejandro y su esposa regresaron a México y poco después de su arribo, tuvieron un bebé.

Durante su estadía, Alejandro, ahora en su faceta de padre, recibió numerosas ofertas de trabajo en el país vecino y fue así como decidieron mudarse temporalmente a Estados Unidos.

Sin embargo, hubo un cambio de planes y de improviso se convirtió en su residencia permanente.

"Cada vez que vendo un sistema de energía solar siento que estoy contribuyendo a limpiar el planeta de la contaminación".- Alejandro Martínez

Fue así como comenzó una nueva etapa en su vida, la cual estaría llena de retos y que, en este momento, forma parte de los sueños que ya cumplió.

Del aprendizaje al éxito

 Sobre su experiencia laboral, Alejandro comentó que, si bien después de la universidad fue necesario obtener nuevos conocimientos de forma constante, en el Tecnológico de Monterrey consiguió las herramientas que necesitaba para formarse como profesionista.

 “Siempre es bueno seguir aprendiendo, porque en la universidad no sólo haces eso, sino que creas un sistema de prioridades que serán de gran utilidad a lo largo de tu vida”, indicó Alejandro.

En sus palabras, lo más importante del proceso de aprendizaje es aterrizar la idea de que se es mucho más que un estudiante.

 “Nunca dejes de hacer lo que te apasiona, porque un día puedes llegar a ser mejor”, señaló el exatec de campus Chiapas.

Actualmente, también es miembro del Hogar Infantil de Chiapas, A.C., y aunque reside fuera del país, continúa involucrado en asuntos de la comunidad.

Su deseo personal es lograr promover el apoyo a los estudiantes del campus Chiapas que buscan oportunidades fuera del país y generar más conciencia social sobre el medio ambiente.

 “Muchas personas creen que a los 54 años ya estás llegando al final de tu vida, pero no es así. Yo apenas estoy empezando. Me estoy reinventando”, finalizó Martínez.



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