Segunda ola de explosiones de dispositivos en Líbano

El miércoles se registraron nuevas explosiones en puntos controlados por el grupo chiita Hezbolá en Líbano, dejando un saldo de al menos 20 muertos y más de 450 heridos, según informes de las autoridades locales. 

Estos incidentes ocurrieron solo un día después de una primera serie de explosiones que ya había causado la muerte de doce personas y dejó 2,800 heridos en ese país.

Las explosiones fueron atribuidas a walkie-talkies utilizados por miembros de Hezbolá, los cuales estallaron en diferentes regiones del país, incluyendo el sur de Beirut, la capital libanesa, y otras áreas en el sur y el este de Líbano.

Según testigos, los estallidos fueron similares a los ocurridos la víspera, lo que ha generado un clima de tensión e incertidumbre en el país.

Una fuente de seguridad consultada por AFP detalló que varias de las explosiones se registraron en un suburbio al sur de Beirut, donde en ese momento se realizaron los funerales de miembros de Hezbolá que murieron en las explosiones del día anterior. 

Corresponsales también reportaron estallidos en las ciudades de Sidón y Baalbek, incrementando el pánico en la población.

Algunos de los aparatos de comunicación que explotaron estaban dentro de vehículos, mientras que otros eran transportados por milicianos de Hezbolá en motocicletas. 

En total, el Ministerio de Salud ha contabilizado al menos 20 fallecidos y más de 450 heridos a nivel nacional.

En el suburbio de Dahye, en Beirut, varios testigos relataron que algunas viviendas resultaron afectadas por incendios provocados por las explosiones. 

Las autoridades han reforzado las medidas de seguridad en la zona, mientras se reportó la presencia de al menos un dron sobrevolando el área, lo que ha generado especulaciones sobre una posible vigilancia o intervención militar.

La Cruz Roja libanesa, a través de su cuenta en la red social X, informó que está respondiendo a Múltiples explosiones con 30 equipos de ambulancias, movilizados para atender a las víctimas en varias áreas, incluyendo el sur de Líbano y Bekaa Valley, donde se concentran los mayores daños.

Por su parte, el Ejército libanés emitió un comunicado instantáneo a la población a no acercarse a las zonas afectadas por las explosiones, catalogadas como "incidentes de seguridad", con el objetivo de facilitar el trabajo de los equipos de emergencia y los cuerpos médicos.

Se desconoce el origen preciso de las explosiones de los aparatos de comunicación y si se trata de una falla técnica o de un sabotaje intencionado.