Regresa Trump a Butler tras el atentado fallido

El sábado, simpatizantes de Donald Trump se congregaron en Butler, Pensilvania, la misma ciudad donde el candidato republicano sufrió un atentado en julio de este año. 

Por lo que el incidente marcó un punto de inflexión en su campaña presidencial y sigue siendo un recordatorio de la violencia que rodea en Estados Unidos.

El repúblicano, protegido detrás de un cristal a prueba de balas, recordó el ataque y agradeció a "la Providencia y la gracia de Dios" por haber sobrevivido al atentado.

Durante su discurso, Trump describió el atentado como un acto de "maldad pura" perpetrado por un francotirador, mientras la multitud lo vitoreaba. 

El evento también destacó por la estricta seguridad, con francotiradores ubicados en edificios cercanos y un dron de vigilancia sobrevolando la zona. 

Este regreso se produjo un mes antes de las elecciones presidenciales, programadas para el 5 de noviembre.

Desde el atentado, Trump ha capitalizado su experiencia como "mártir político", lo que le permitió ganar ventaja en las encuestas.

En particular, su imagen ensangrentada después del ataque, mientras agitaba el puño y gritaba, se viralizó rápidamente y se convirtió en un símbolo de su campaña. 

Muchos de sus seguidores en Butler vestían camisetas con iconografía relacionada con el atentado, e incluso algunos lucían tapones para las orejas que imitaban el vendaje que Trump usó tras el tiroteo.

Por su parte, el expresidente aprovechó el evento para criticar la respuesta federal ante el huracán Helene, acusando sin pruebas a la administración Biden de redirigir fondos de ayuda a los migrantes en lugar de asistir a las víctimas de Helene. 

Siendo parte de su estrategia política de atacar hacia la actual administración en los últimos meses.