Prohíbe NY la venta de gatos y perros en tiendas de mascotas

Nueva York, EU.- Nueva York se convirtió el jueves en el estado más reciente en prohibir la venta de gatos, perros y conejos en las tiendas de mascotas en un intento de atacar las operaciones comerciales de cría calificadas por los críticos como “fábricas de cachorros”.

La nueva ley, que fue firmada por la gobernadora Kathy Hochul y entra en vigencia en 2024, permite que las tiendas de mascotas trabajen con refugios para ofrecer animales rescatados o abandonados en adopción. También prohibirá a los criadores vender más de nueve animales al año.

Las tiendas de mascotas han argumentado que la ley no hará nada para cerrar a los criadores de otros estados o aumentar sus estándares de atención y dijeron que resultaría en el cierre de las docenas de tiendas de mascotas que quedan en Nueva York.

California promulgó una ley similar en 2017, convirtiéndose en el primer estado en prohibir tales ventas.

Si bien esa ley requiere que las tiendas de mascotas trabajen con refugios de animales u operaciones de rescate, como lo está haciendo Nueva York ahora, no regula las ventas de los criadores privados.

En 2020, Maryland prohibió la venta de gatos y perros en las tiendas de mascotas, lo que provocó el rechazo de los dueños de tiendas y criadores que impugnaron la medida en los tribunales. Un año después, Illinois prohibió a las tiendas de mascotas vender cachorros y gatitos criados comercialmente.

En Nueva York, los grupos de defensa de las mascotas han pedido durante mucho tiempo el cierre total de las instalaciones que crían y venden animales con fines de lucro, diciendo que los animales se crían en condiciones inhumanas antes de enviarlos a las tiendas.

Jessica Selmer, presidenta de People United to Protect Pet Integrity, una coalición de propietarios de tiendas de mascotas de Nueva York, calificó la ley de "descuidada" y "contraproducente" y dijo que espera que el gobernador "considere remedios legislativos para algunas de las trampas del proyecto de ley".

La nueva ley no afectará a los criadores domésticos que vendan animales nacidos y criados en su propiedad.