Está Pakistán de nuevo bajo el escrutinio internacional

Pakistán- Fue hace un año cuando las tropas de Estados Unidos abandonaron Afganistán, acatado el Acuerdo de Doha mediante el cual los americanos se comprometían al retiro y a cambio, los Talibanes no volverían a acoger a miembros de Al Qaeda, pero tras el ataque en que murió Ayman al Zawahri, los ojos de la opinión pública han volteado de nuevo a la zona.

Hay que recordar que Al Zawahri fue la cabeza de Al Qaeda al morir Osama bin Laden en 2011, se le considera uno de los principales artífices de los ataques terroristas del 11S.

Un líder de Pakistán expuso que “el asesinato de Ayman al-Zawahri ha planteado muchos interrogantes”,  pues deja ver la implicación de la comunidad talibán en su protección y encubrimiento.

“El Talibán estaba al tanto de su presencia en Kabul, y si no lo estaba, tienen que explicar su posición”, apuntó el oficial.

Al Zawahri vivía a sus anchas en una lujosa vivienda cerca de la capital afgana. Hasta ahora El Talibán no ha anunciado quién murió en el ataque.

Durante la primera mitad de 2022, Al Zawahri incrementó su contacto con sus seguidores a través de mensajes de video y audio en los que aseguró que Al Qaeda podía competir con el grupo extremista Estado Islámico por el liderazgo de un movimiento global, según el informe adecuado del Equipo de Apoyo Analítico y Seguimiento de Sanciones.

El ataque no pudo llegar en un peor momento político para Afganistán recordando que enfrenta la condena de la comunidad internacional por negarse a restaurar la educación para las niñas, a pesar de haberse comprometido a ello.

A ello se le suma la crítica de las Naciones Unidas por los abusos de los derechos humanos.

El retiro de la ayuda financiera internacional hizo que la ya deteriorada economía del país elevara la pobreza y generó una de las peores crisis humanitarias del mundo.

El Talibán ha estado tratando de reactivar esas ayudas, pero el asesinato de Al Zawahri ya ha sido aprovechado por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, como un indicio de que el grupo “violó flagrantemente el Acuerdo de Doha y las repetidas garantías (...) de que no permitirían que el territorio afgano fuera utilizado por terroristas para amenazar la seguridad de otros países”.