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El caníbal de Las Vegas

El caníbal de Las Vegas


Publicación:05-05-2024
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Un testigo llamó al 911 para informar que una persona había atacado a un cliente afuera de un 7-Eleven.

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 5 (EL UNIVERSAL).- La policía investiga el asesinato de un hombre en Las Vegas , un caso que ha conmocionado a los estadounidenses, al revelarse que el asesino se comió parte de la cara de la víctima.
Colin Ichiro Czech, llamado el "caníbal de Las Vegas", ingresó en el Centro de Detención del Condado de Clark el domingo 28 de abril, en relación con un asesinato cometido esa mañana en Las Vegas Boulevard, de acuerdo con el Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas.
El diario USA Today obtuvo la denuncia penal del caso. En ella, se identifica a la víctima como Kenneth Brown. Las autoridades fueron notificadas del asesinato, ocurrido cerca del Haunted Museum, alrededor de las 5:33 de la mañana.
Un testigo llamó al 911 para informar que una persona había atacado a un cliente afuera de un 7-Eleven. De acuerdo con la denuncia obtenida por el medio, Czech golpeó a Brown en la cabeza y este cayó al suelo. Acto seguido, el agresor golpeó la cabeza de su víctima contra el suelo, mientras vociferaba.
Poco después, la policía recibió otra llamada de otro testigo, asegurando que Czech estaba sobre el cuerpo de la víctima y se estaba comiendo la cara de ésta.
Cuando la policía llegó al lugar, descubrieron a la víctima en estado inconsciente y al atacante cubierto con material biológico en el cabello, boca y ropa. Brown fue trasladado al hospital, donde se le declaró muerto.
En un primer momento, Ichiro, de 29 años, alegó que Brown lo había atacado y por eso lo mató. Sin embargo, después cambió la versión. Señaló que que había perdido la conciencia de forma intermitente y que llevaba cinco días despierto, porque algo lo poseía. Según su relato, voces en su cabeza le dijeron que matara a la víctima.
Documentos judiciales revelan que la víctima sufrió un gran corte en la cabeza y que le faltaban un ojo y una oreja. Czech confesó que se los comió.


« El Universal »