Sentencian a la armera de Rust a 18 meses de prisión

La mujer encargada de las armas utilizadas en el set de "Rust", Hannah Gutierrez-Reed, fue sentenciada este lunes a 18 meses de prisión por el crimen de homicidio involuntario, tras la muerte de la directora de fotografía, Halyna Hutchins.

Gutierrez-Reed fue declarada culpable el pasado mes de marzo, por lo que ha estado recudía durante más de un mes en una prisión de condado, en la localidad de Santa Fe, en Nuevo Mexico.

Cabe recordar que Hutchins perdió la vida luego de que al actor Alec Baldwin le apuntara y se le disparara el arma, la cual contenía una bala real, situación que derivó en la condena de la armera de 26 años.

Tras ser acusado por el mismo delito, Baldwin se declaró no culpable, sin embargo, su juicio se llevará a cabo el próximo mes de julio, en una corte de Santa Fe.

Este dictamen fue realizado por la jueza de Nuevo Mexico, Mary Marlowe Summer, quien también está revisando el procedimiento del juicio en contra de Baldwin.

Durante el juicio contra la armera, la fiscalía la culpó de negligente por haber llevado munición real al set de producción de "Rust", donde estaba completamente prohibida, además de fallar en su tarea de seguir protocolos básicos de seguridad.

El juicio duró dos semanas y el jurado deliberó por más de tres horas, hasta llegar a un veredicto.

Según testigos, Hannah lloró cuando el agente de Hutchins, Craig Mizrahi, la describió como un gran talento y una estrella en ascenso en la industria de Hollywood, subrayando que su muerte ocurrió tras una cadena de eventos desafortunados.

No obstante, señaló a Gutierrez-Reed de no cumplir con su labor, pues de haberlo hecho, Halyna seguiría viva.

La semana pasada se dio a conocer que la familia de la armera hizo una solicitud económica a través del medio de GoFundMe, en donde señalan que el juicio es injusto, además, que exigir justicia para Halyna no significa que haya justicia para Reed.

De acuerdo con el objetivo, la familia está pidiendo $100 mil dólares, a fin de poder apelar la condena.