No se prevé reconciliación de Harry con la realeza

En medio de las controvertidas declaraciones de Meghan Markle y el príncipe Harry en vías de su separación definitiva de la familia real, el todavía duque de Sussex reveló que su papá, el príncipe Carlos, le pidió evitar toda comunicación los meses previos a la entrevista con Oprah Winfrey.

Esta declaración dejó al descubierto el carácter distante de la familia real y su muy peculiar manera de solucionar los problemas familiares. Incluso, ocurrió una anécdota similar entre la princesa Margarita y Diana de Gales después de la explosiva entrevista de Lady Di para el programa Panorama de la BBC , donde denunció que su matrimonio era una farsa.

Aunque el acusado directo era el príncipe Carlos, nadie lo tomó tan mal como la hermana de la reina Isabel II.

En ese momento, la entrevista fue algo inadmisible para Margarita , no porque lo que reveló Diana no fuera cierto, sino al contrario. La confesión de la princesa fue vista por 23 millones de británicos, lo que significó 40% de la población total de Reino Unido.

La bomba que soltó Lady Di con el periodista Martin Bashir provocó que la reina exigiera de inmediato el divorcio de su hijo mayor para que Diana se alejara de la familia real. No obstante, la firma del divorcio llegó hasta cuatro años después, un lapso en el que la ex esposa del príncipe Carlos siguió viviendo muy cerca de la princesa Margarita.

La convivencia entre Lady Di y la hermana menor de Isabel II había sido difícil desde que el matrimonio de la princesa y el príncipe Carlos comenzó a tener problemas y se agravó por la popularidad de Diana. El autor de la biografía de Diana, Andrew Morton, dijo en el documental Chanel 5 The Royal Family at War que Margarita le dejó de hablar a Diana hasta su muerte, en agosto de 1997.

Según Morton, irónicamente cada vez que Lady Di invitaba a un hombre a pasar la noche a escondidas en su coche, Margarita siempre observaba desde detrás de las cortinas. En el mismo documental, Paul Burrell, el ex mayordomo de Diana confirmó las revelaciones de Andrew y dio a conocer que esa costumbre de la hermana de la reina inició desde principios de 1981, cuando quedó embarazada de William.