Hace Angelina caso omiso a las acusaciones de venganza

Adiós a la imponente mansión en el sur de Francia de los Jolie-Pitt. Angelina Jolie finalmente ha vendido su parte de la finca y la bodega francesa, - valorada en su totalidad por 142 millones de euros-, que adquirió junto a Brad Pitt hace más de una década. Tenute del Mondo, la división de vinos del Grupo Stoli, ha comprado el 50 por ciento de la propiedad Château Miraval a Jolie por una cantidad no revelada, según un comunicado de prensa difundido el pasado martes.

Esta fabulosa residencia en la Provenza francesa había sido objeto de la última disputa legal entre la expareja y finalmente la protagonista de Maléfica ha hecho caso omiso a las acusaciones de vengaza por parte de su exmarido y ha vendido su parte como ese era su deseo.  El mes pasado, la ganadora de un Oscar por Inocencia interrumpida recibió la autorización para poder vender sus acciones de la mansión en la que se casó con Brad Pitt en 2014, una boda publicada en exclusiva mundial por la revista ¡HOLA!  Hasta entonces Angelina no había podido deshacerse de su participación ya que había un acuerdo legal por escrito que evitaba que una de las partes pudiera tomar decisiones financieras sobre sus propiedades durante el proceso de divorcio. 

Jolie presentó por primera vez los documentos para desbloquear esa orden judicial y deshacerse de los bienes el pasado 30 de junio, pero el juez no aceptó la solicitud. Después de presentar de nuevo la petición el pasado 6 de julio, el magistrado este verano aún no había tomado una decisión y Jolie a través de sus abogados pidió otra audiencia para el 22 de septiembre para solicitar, una vez más, la eliminación de la orden que impedía a la actriz poder llevar a cabo dicha transacción. Finalmente el juez levantó esas restricciones. 

Como última baza, Brad Pitt contratacó interponiendo una nueva demanda a su exmujer para tratar de volver a ser el accionista mayoritario de la finca. Originalmente, cuando la expareja compró las acciones de Quimicum, la empresa propietaria del Chateau Miraval, en 2008, Pitt y su empresa, Mondo Bongo, tenían una participación mayoritaria de 60/40 sobre Jolie y su empresa, Nouvel. Al parecer esa mayoría se equilibró cuando Mondo Bongo transfirió el 10% a Nouvel, según la demanda, por la simbólica cifra de 1 euro en 2013, un año antes de su boda y tres años antes de que Jolie solicitara el divorcio de Pitt. La nueva demanda presentada por los abogados del actor buscaba que se anulara esa transferencia del 10%, en un movimiento para restaurar su mayoría de accioniones de 60/40 en el patrimonio, con el argumento de que el precio de 1 euro no es una cantidad "seria" como así lo requiere la ley de Luxemburgo.