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Así fue el quiebre de la aerolínea Mexicana de Aviación

Así fue el quiebre de la aerolínea Mexicana de Aviación


Publicación:06-01-2023
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Durante ese año, la empresa solicitó ahorros a sus sindicatos argumentando problemas financieros.

CIUDAD DE MÉXICO.- El gobierno mexicano reveló la tarde de este viernes la compra de la marca Mexicana de Aviación, misma que dejó de operar el 28 de agosto del 2010 por problemas financieros, pero ¿a qué se debió el quiebre de la empresa?
La Compañía Mexicana de Aviación (CMA) que fue fundada en 1921 y tuvo sus oficinas principales en la Torre AXA México, habría presentado problemas desde 2006 cuando el desentendimiento con los sindicatos de trabajadores desencadenó una serie de problemáticas que concluyeron en su quiebra.
Durante ese año, la empresa solicitó ahorros a sus sindicatos argumentando problemas financieros. La Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) firmó un contrato que le ahorró 200 millones de dólares a la aerolínea por cuatro años a través de la adecuación de salarios y prestaciones. Sin embargo, no pasó lo mismo con la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), ya que se planteó un conflicto jurídico de naturaleza económica contra este sindicato al no haber alcanzado un acuerdo.
A pesar de que Mexicana de Aviación hizo pública información en la que aseguraban que la compañía no era económicamente viable sin la contribución de sus sindicatos, ésta continuó con sus funciones, y además, creó otra empresa de nombre Mexicana Link, que comenzó a operar en diciembre de 2009.
Mientras los dueños de Mexicana negociaban los contratos con los sindicatos, los problemas financieros se agudizaron gracias a los incrementos periódicos en los combustibles y factores externos como la contingencia por la pandemia de influenza en 2009. Fue hasta 2010 a 2014 que varios grupos mostraron interés en adquirir la aerolínea; sin embargo, al no comprobar recursos y no alcanzar acuerdos con los sindicatos de trabajadores, las negociaciones no prosperaron, por lo que la jueza Edith Alarcón, del Juzgado Décimo Primero en Materia Civil del Distrito Federal, la declaró en bancarrota el 4 de abril del 2019.


« El Universal »