Alistan Acapulco para convención bancaria

La Asociación de Bancos de México (ABM) dijo que Acapulco está listo para la 87 convención bancaria, que se llevará a cabo los días 18 y 19 de abril en el puerto, donde se ha realizado un gran esfuerzo por reconstruir la infraestructura afectada por el huracán "Otis".

El presidente de la ABM, Julio Carranza, dijo que está confirmada la asistencia de las candidatas a la presidencia de la república de Morena, Claudia Sheinbaum; del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, y de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez.

En tanto, reiteró que el presidente Andrés Manuel López Obrador también asistirá al evento, así como la gobernadora del Banco de México, Victoria Rodríguez, así como la plana mayor del sector financiero del país.

De acuerdo con el programa de la ABM, el presidente López Obrador estará en la ceremonia de inauguración el jueves 18 de abril, mientras que la pasarela de aspirantes a la presidencia se hará el viernes 19 de abril.

Carranza dijo que la convención bancaria, considerado el evento del sector financiero más importante del país, es un foro neutral ya con tradición para que se expongan las propuestas de los aspirantes a la presidencia de la República.

El presidente de ABM dijo que el hotel Palacio Mundo Imperial donde se realizará el evento, se encuentra listo para la convención, con lo que se esperan a mil 400 asistentes.

El presidente de la ABM resaltó que la recuperación del puerto se mantiene en marcha, con 95% de las sucursales operando con normalidad, mientras que los cajeros están casi al 100 por ciento.

CATÁSTROFE

El huracán Otis golpeó Acapulco con vientos de hasta 195 km/h y fuertes lluvias, causando estragos económicos significativos en la región. 

Según estimaciones preliminares, el sector turístico, vital para la economía de Acapulco, sufrió pérdidas superiores a los 100 millones de dólares debido a la cancelación masiva de reservas y el cierre temporal de hoteles, restaurantes y atracciones turísticas.

La infraestructura también resultó gravemente afectada, con daños en carreteras, puentes y redes de distribución de energía eléctrica. 

Se estima que los costos de reparación y reconstrucción de la infraestructura podrían ascender a más de 50 millones de dólares. 

Además, miles de viviendas y negocios sufrieron daños, lo que generó pérdidas para los propietarios y empresarios locales.