Canales sigue demostrando que trae de clientes a los Tigres

Sergio Canales ha vuelto a demostrar que sigue siendo como jugador de Rayados el principal verdugo de los Tigres.

Con su gol ante los felinos del sábado pasado en la fecha 12 de la Liga MX, el mediocampista español demostró una vez más que no le pesa en lo futbolístico el jugar contra los auriazules.

Desde que llegó al club regio en el verano del año pasado, el español ha registrado ante Tigres hasta tres goles, dos asistencias y ha incidido con sus acciones ofensivas en otros tantos frente a ese rival.

La primera ocasión de todo esto fue en los octavos de final de la Leagues Cup del año pasado, donde Rayados venció 1-0 a Tigres con un gol de penal de Sergio Canales que fue al minuto 97.

Ya en el 3-3 de la temporada regular del Torneo Clausura 2024, Canales brindó hasta dos asistencias para los goles de Luis Romo y Germán Berterame.

Tras ello, el español influyó en la victoria por marcador de 2-1 sobre Tigres en los cuartos de final de ida de ese Torneo Clausura 2024.

En ese partido, Sergio marcó un gol y estuvo cerca de su doblete cuando en una jugada se barrió en el área chica para rematar a portería y el balón pegó en el poste, lo cual fue aprovechado por Maxi Meza, quien mandó el mismo al fondo de las redes.

Posteriormente a esto, pero en los cuartos de final de vuelta de esa Liguilla, Canales con un remate desde fuera del área hizo que el balón pegara en el poste y en el rebote le quedara el mismo a Jordi Cortizo para que marcara el 1-1 en el duelo y el 3-2 en el global.

Por último, Sergio Canales marcó uno de los cuatro goles con los que Rayados venció a Tigres el sábado pasado en la fecha 12 de la Liga MX, siendo eso en un tiro libre en el que venció a Nahuel Guzmán.

En resumen, el mediocampista español ha sido un claro verdugo de los Tigres y de paso un auténtico dolor de cabeza para el equipo auriazul, motivo por el cual eso intentará mantenerlo en los próximos partidos en los que vuelva a enfrentarlos, todo eso no solamente para beneficio propio, sino también para que su afición lo siga queriendo.