Cultural Educación
Escuela de Lenguas de la UNAM se va a paro
Publicación:21-09-2023
El pliego petitorio presentado contiene cinco puntos, por ejemplo, la denuncia de los despidos injustificados de personal de la carrera de Traducción
Alrededor de 400 estudiantes de la Escuela Nacional de Lenguas, Lingüística y Traducción (ENALLT), que pertenece a la UNAM, acordaron un paro de actividades después de reunirse hoy con profesores para discutir sobre ciertas demandas de la comunidad que no han sido atendidas.
El pliego petitorio presentado contiene cinco puntos, por ejemplo, la denuncia de los despidos injustificados de personal de la carrera de Traducción, tras los cuales se contrató a profesores no aptos para las asignaturas (en particular, se nombra el caso de Demetrio Ibarra, pero hay otros); procesos administrativos deficientes que comprueban la falta de maestros en algunos semestres, pese a que lo nieguen las autoridades universitarias, y un organigrama que, durante dos periodos directivos, ha sido poco claro para la población de la ENALLT.
Tras anunciar el paro total de actividades, en el Edificio C de la escuela, mismo que no se encuentra dentro del campus central de Ciudad Universitaria, un grupo de 20 estudiantes tomó las instalaciones como parte de la protesta.
Aproximadamente a las 9 de la noche, tres patrullas llegaron al inmueble, denunció Javier Guzmán, profesor de traducción; de los tres vehículos, sólo permaneció uno con dos oficiales, cuya intención era desalojar a los alumnos, así como cerrar y sellar el edificio.
Tras una hora de negociaciones, se acordó que los estudiantes podían permanecer en los pasillos del edificio, más no en los salones para no "poner en riesgo el patrimonio" y por razones protocolarias. En la negociación participaron, además, seis profesores de Traducción.
Es importante resaltar que, en el caso del Edificio C, el acuerdo fue que los estudiantes podían quedarse dentro del inmueble; aunque después se les intentó desalojar.
A los elementos de seguridad universitaria los acompañaron Eric Zepeda Trejo, jefe de la oficina jurídica; Rubén Olmedo Ponce, secretario administrativo, y José Roberto Zalazar Tehuitzie, jefe del departamento de servicios generales, quienes se hicieron presentes en los tres edificios para sus respectivos cierres.
En el Edificio B se procedió a sellar por completo; en el A se le cedió el vestíbulo a los paristas, mientras que los salones y oficinas fueron cerrados. El secretario administrativo les informó, a los paristas del Edificio C, que hace tiempo fue sustraído un proyector que era propiedad de la escuela.
En palabras de Guzmán, el secretario manejó un doble discurso en el que se habló de confianza hacia los paristas, pero se les prohibió la estancia en los salones. El profesor también calificó esta intervención como una amenaza.
« El Universal »