El romero combate la endocarditis y protege de infecciones

CIUDAD DE MÉXICO.- Las plantas, semillas y raíces han sido la materia prima de la medicina tradicional durante muchos años. En ellas se han descubierto importantes propiedades que benefician a la salud humana y que, por tal motivo, se han transmitido de generación en generación.
En la actualidad, más allá de la que la misma ciencia las utiliza para producir sus fármacos, algunas prácticas como el preparado de infusiones a base de plantas y hierbas se mantiene como una tradición en muchas partes del mundo. Es por eso que en esta oportunidad te contaremos sobre una planta aromática que combate la endocarditis y protege al organismo de infecciones intrahospitalarias.

Romero para el cuidado de la salud

En primer lugar, debemos saber que la endocarditis es la inflamación del endocardio, el recubrimiento interno de las cámaras y las válvulas del corazón, una enfermedad infrecuente, pero potencialmente mortal, de acuerdo a datos de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Desde el Instituto Mayo Clinic aclaran que, por lo general, la endocarditis se debe a una infección que daña al corazón y puede destruir las válvulas cardíacas. Además, precisa que los factores que aumentan las probabilidades de que se produzca una endocarditis incluyen válvulas cardíacas artificiales, válvulas cardíacas dañadas u otros defectos del corazón.
En este marco, aparece el romero como una planta aromática popular en la gastronomía, pero con propiedades beneficiosas para el cuidado de la salud. Se trata de un arbusto originario del Mediterráneo que aporta al organismo taninos, ácido rosmarínico, rosmaricina, hierro y vitaminas B6 y C, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (España).
Desde el Comité de Medicamentos a Base de Plantas de la Agencia Europea de Medicamentos señalan que los componentes del romero le otorgan propiedades antimicrobianas, antioxidantes y antiinflamatorias. Por tal motivo, en el caso del aceite esencial de romero, estudios han demostrado una gran eficacia contra la bacteria Pseudomonas aeruginosa que causa infecciones hospitalarias graves y en la prevención de la endocarditis.
Además, esta planta posee una acción tónica y estimulante sobre el sistema nervioso y circulatorio, mientras que en su uso externo es antiséptico, analgésico, cicatrizante y estimulante del cuero cabelludo, según destaca la Fundación Española de la Nutrición.