¿Cómo convertirse en Gaspar, Melchor o Baltasar?

Los juguetes no solo ayudan a dibujar sonrisas en los niños, sino también favorecen su desarrollo, desde físico hasta mental.

En esta fecha especial se convierten en el regalo más deseado por los pequeños; sin embargo, no todos tienen acceso a la magia de la temporada. Es por ello que la donación de estos objetos representa un noble acto capaz de cambiar su estado de ánimo y de tener un impacto positivo en su vida.

"El juego es un proceso que permite el aprendizaje constante, el manejo de las emociones, así como el fortalecimiento de habilidades tanto socioemocionales como cognitivas. Los juguetes se vuelven una herramienta que fomenta la posibilidad de imaginar historias, conocer nuevas formas culturales y mantener una convivencia con los demás", señala Jorge Vidal, director general de la Fundación Pro Niños de la Calle.

Donar un juguete va más allá de entregar pelotas o muñecas: este debe dejar una enseñanza en quienes realizan este acto, además de promover valores como la empatía, el respeto y la humildad.

Involucrarse como familia, desde adultos hasta pequeños, ayuda a comprender mejor su significado y a crear una tradición que realmente transmita el mensaje de esta época: compartir, reflexionar y dar amor.

Además, esta acción permite a los niños entender de forma práctica la importancia de las cosas. A veces son tantos los juguetes que reciben, que pueden perder la capacidad de asombro y no mostrar interés respecto al valor que tienen.

JUGUETES QUE SE PUEDEN DONAR

Hay diferentes asociaciones, movimientos y campañas que se suman a la recolección de juguetes con motivo de Día de Reyes. Aun cuando toda aportación es significativa, deben tomarse en cuenta los lineamientos de cada una de estas alternativas, por ejemplo, si solo se reciben objetos nuevos o también de segunda mano.

Al donar juguetes debe tomarse en cuenta que sean prácticos, muñecas, figuras de peluche, balones, pelotas, rompecabezas, juegos de memoria, ajedreces, loterías, cochecitos, trenes, aviones, triciclos, juegos de té, cocinas, construcciones de piezas, muñecos de acción, tapetes para bebés, instrumentos musicales, así como cuentos infantiles y libros para colorear.

Al pensar en donar, hay que tomar en cuenta la organización a la que se van a destinar, sobre todo para poner atención en el rango de edades recomendadas de las piezas, apunta Katty Beltrán, directora general de la Fundación Dibujando un Mañana.

En caso de tratarse de objetos de segunda mano se recomienda, sobre todo, que se encuentren en excelente estado.

También se sugiere evitar donar pistolas, ametralladoras o sets con granadas, así como juguetes que produzcan mucho ruido.

REGALAR SONRISAS ESTÁ DE MODA

Motivados por una campaña anual realizada desde la sede central en Nueva York, Estados Unidos, el Fashion Group International de la Ciudad de México echó a andar, hace casi 20 años, el Club de los Reyes Magos, una iniciativa que tiene como fin entregar juguetes y chamarras nuevas a niños beneficiarios de Casa de la Amistad.

 "Cada año, invitamos a nuestros socios a donar estos artículos para llevar alegría a los pequeños. Compartir tiempo para formar comunidad, así como regalar sonrisas, es muy gratificante. Estas acciones nos invitan a interesarnos por el prójimo, ser conscientes de las distintas realidades y descubrir que todos los niños son felices con un detalle a pesar de las circunstancias", indica Zaira Marino, directora de la organización de moda.

La recepción de juguetes y chamarras estará abierta hasta el nueve de enero.

ACERCARSE A ELLOS DE CORAZÓN

3. En la Fundación Pro Niños de la Calle no se promueve la donación de juguetes como el simple acto de llevarles estos objetos, sino buscan que los artículos donados tengan un propósito (sobre todo, que fomenten el desarrollo de los infantes) y que las personas se involucren, aunque sea por unos momentos, con la situación que atraviesan. "La donación representa una buena oportunidad para poder acercarnos a la vida de otras personas, así como de comprender que, más allá de un juguete, existe la posibilidad de entregar tiempo, de conocer sus historias, de aprender y de ser sensible a la problemática que viven", subraya Jorge Vidal, director de dicha asociación.

UN LUGAR PARA JUGAR Y APRENDER

Más que un lugar donde los niños puedan jugar, las ludotecas tienen como objetivo impulsar sus habilidades tanto físicas como mentales.

Con este propósito en la mira, la Fundación Dibujando un Mañana colabora con Duracell para equipar un centro de este tipo, el cual estará localizado en la Cuauhtémoc.

Katty Beltrán, directora general de la asociación, dijo que hasta el 15 de enero, las personas podrán donar juguetes tanto nuevos como usados (perfectamente limpios y en muy buen estado) en tiendas de autoservicio de la CDMX, el Estado de México y Querétaro. Una vez concluido el tiempo de recolección, se revisarán los objetos entregados y, si cumplen con los requisitos para ser usados de manera segura, se almacenarán hasta que la ludoteca se encuentre lista.