Cultural Más Cultural
Celebran cristianos la Epifanía a los Reyes
Publicación:06-01-2024
TEMA: #Dia de Reyes
Aunque las Sagradas Escrituras no hacen mención a los nombres de los Reyes, a partir del siglo VII se les fue asignando, por tradición, los que hoy se utilizan
El 6 de enero la Iglesia Católica celebra la Solemnidad de la Epifanía del Señor. En ella se recuerda la "manifestación" del Mesías esperado, quien se revela a todos los pueblos de la humanidad, representados en los Reyes Magos que llegaron a Belén desde Oriente.
La fiesta de los Reyes Magos o "bajada de Reyes" es comúnmente llamada Epifanía, palabra que en griego significa "manifestación", en el sentido de que Dios se revela y se da a conocer.
No obstante, la Iglesia celebra como Epifanías tres manifestaciones de la vida de Jesús: la Epifanía ante los Magos de Oriente (manifestación a los paganos), la Epifanía del Bautismo del Señor (manifestación a los judíos) y la Epifanía de las bodas de Caná (manifestación a sus discípulos).
La fiesta de la Epifanía es una de las más antiguas de los cristianos, muy probablemente la segunda después de la Santa Pascua. Se inició en Oriente y luego pasó a Occidente por el siglo IV.
Estudios sostienen que la Epifanía se fijó para el 6 de enero debido a que en este día se conmemoraba el nacimiento de Aión, dios patrono de la metrópoli de Alejandría, que al parecer estaba relacionado con el dios sol. Asimismo, porque desde tiempos antiguos en esta misma fecha se celebraba el solsticio de invierno en Egipto.
Cuenta la historia que tres Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, montados en un camello, un caballo y un elefante, viajaron desde el Oriente hasta Jerusalén guiados por una estrella, para adorar a un profeta recién nacido y llevarle como ofrendas: oro, incienso y mirra.
Los tres "Reyes del Oriente" encontraron al Niño, quien tenía días de nacido, se postraron ante él y le dieron sus presentes.
San Mateo, el único que habla de los Magos en la Biblia, explica que fueron de "Oriente", una zona que para los judíos eran los territorios de Arabia, Persia o Caldea. Por otro lado, los orientales llamaban "magos" a los doctores.
"Mago" en lengua persa significaba "sacerdote", y justamente los magos ("magoi" en griego) eran una casta de sacerdotes persas o babilonios. Ellos no conocían la revelación divina como los judíos, pero estudiaban las estrellas en su deseo de buscar a Dios.
La tradición llamó "reyes" a los magos en referencia al Salmo 72 (10-11), que proclama: "Los reyes de Occidente y de las islas le pagarán tributo. Los reyes de Arabia y de Etiopía le ofrecerán regalos. Ante él se postrarán todos los reyes y le servirán todas las naciones".
Los nombres de los Magos no aparecen en las Sagradas Escrituras, pero la tradición les ha asignado algunos. En un manuscrito de París de fines del siglo VII se les llama Bitisarea, Melchor y Gataspa, pero en el siglo IX se empezó a propagar que eran Gaspar, Melchor y Baltasar.
« El Porvenir / César López »