Afronta el duelo de pasar un 10 de mayo sin mamá

Mamá no está. Murió. Es 10 de mayo y muchos podrán celebrar que la tienen, otros enfrentarán no tenerla viva.

La tanatóloga Vicenta Hernández asegura que vivir la ausencia de una madre depende de la capacidad de resiliencia de cada persona y de las situaciones familiares que se tenían, como el tipo y calidad de relación, los años que la tuvimos y la realidad que vivimos.

"A cada quien nos toca de una manera diferente ¿comparada con qué?, pues con el momento de la vida en que te sorprende un duelo. Hay veces que no tienes tiempo de llorarlo porque tienes otras necesidades inmediatas que resolver, a veces la situación económica atrapa y no permite sacar el dolor, y para salir adelante las personas convierten el dolor en enojo para tener fuerza, y muchos años después es cuando pueden llorar esa muerte", explica.

¿Uno se prepara para perderla? "Nos preparamos para que mueran las personas que son mayores que nosotros. No estamos preparados para estar sin ellos, estamos preparados para esta parte de saber que algún día todos nos vamos a morir", asegura.

¿Como vivir el 10 de mayo sin mamá? "Cada persona tiene necesidades diferentes y son estas las que indican cómo pasar el día; por ejemplo, frente a la muerte siempre hay culpa, podemos liberarnos de culpas o podemos estar solos o reunirnos en familia; algunos van de viaje para alejarse, pero hay que ver desde dentro de mí qué estoy necesitando", detalla Hernández.

"Quien quiera hacer fiesta, que la haga, no hay una receta. Hay quienes hacen una foto familiar con la silla vacía, otros hacen un ritual, escriben cosas sobre lo que se sienten, todo es válido", finaliza la experta.