Cultural Salud
A qué se le puede llamar té y cuántas variedades existen
Publicación:24-05-2021
TEMA: #TE
El consumo de té en México se refuerza con ayuda de algunas tendencias de consumo como lo son los famosos blends, la mixología y hasta la repostería
CIUDAD DE MÉXICO.- Han pasado más de dos mil años desde que los chinos domesticaron la planta de Camellia Sinensis
y le regalaron al mundo el té, una bebida elegante y llena de misticismo que fascina a todo aquel que la prueba. Vaya, no por nada es la segunda bebida de mayor consumo en el mundo después del agua.
No está de más recordar que, aunque en México se le llama té a cualquier infusión, para que un té sea considerado como tal, tiene que provenir de la planta de Camellia Sinensis. Esta codiciada planta, a su vez, tiene distintos subvarietes pero, básicamente, de ella se obtienen cinco tipos de té: blanco, verde, oolong (azul), negro y Pu-erh (rojo).
"Las principales diferencias de cada té son sus niveles de oxidación (o falta de) y las partes de la planta que se utilizaron para obtener cada uno. Por ejemplo: el té blanco se recolecta y marchita de manera natural; y no tiene ningún tipo de enrollado (proceso en el que se le extraen los jugos). El té verde se recolecta y lo que busca el productor es detener el proceso de descomposición de la hoja lo más rápido posible, técnicamente se recolecta y no se marchita ni oxida; mientras que el Oolong es uno de los más complejos, pues se recolecta, marchita, oxida, enreda y seca, repitiendo el proceso muchas veces. Por su parte, el té negro se recolecta, marchita, oxida y se seca a mayores temperaturas", explica Andrés Jurado, codirector de la Escuela Mexicana de Té.
¿Cómo elegir un buen té?
No importa el tipo de té que quieras comprar, lo principal es contar con un proveedor especializado y de confianza.
"No todo el té que se vende es de alta gama. También puedes encontrar de media y baja. Pero, para saberlo, tienes que contar con un vendedor de confianza", comparte Andrés.
"Para escogerlo fíjate que las hojas estén lo más enteras posible y no luzcan quebradizas: y, para conservarlo en óptimas condiciones," se recomienda guardarlo en bolsas o cajas herméticas, no ponerlo al lado del café o especias pues de lo contrario, absorberá sus aromas; además de mantenerlo alejado de la luz y la humedad", aconseja el experto.
La hora del té
Ya tienes el té perfecto y estás listo para disfrutarlo. Ahora lo que queda es saber cómo prepararlo a la perfección. "Realmente la infusión depende de la variedad del té y es algo que tu proveedor te debe de decir. Sin embargo, de manera general hay que cuidar la proporción del agua y las hojas de té, por ejemplo: nunca hay que rebasar los 90 mililitros de agua por cada gramo de té. También hay que cuidar la temperatura del agua: los tés verdes se infunden a menor temperatura y por no más de dos minutos, mientras que los negros, oolongs y algunos blancos se infusionan a mayor temperatura durante tres, cuatro y hasta cinco minutos, dependiendo de su gama", explica el codirector de la Escuela Mexicana de Té.
Té a la mexicana
La cultura del té en México crece año con año y, aunque no estamos ni tantito cerca del consumo que tienen otras naciones amantes de esta bebida, se espera que crezca el interés por ella. "Es un producto que, sin duda, está despertando mucho interés: estamos seguros que en los próximos años tomará una fuerza muy importante", asegura Andrés.
"La importación de té ha crecido mucho en los últimos 10 años. Por ejemplo, el año pasado se importaron entre mil 400 y mil 600 toneladas de té, aunque si lo comparamos con Chile, que es el país latinoamericano con mayor consumo y que importa 23 mil toneladas, esto te deja claro el nivel de consumo que hay. Pero es como en todo: mientras más cultura, mejores consumidores", comparte Andrés.
El consumo de té en México se refuerza con ayuda de algunas tendencias de consumo como lo son los famosos blends, la mixología y hasta la repostería: solo basta con ver los postres hechos con el popular matcha, un tipo de té verde pulverizado. "Sin duda, estas tendencias ayudan mucho a que el té llegue a distintos nichos y, aunque no se aumente el volumen de consumo, sí se encuentra en la mente de los consumidores. De hecho, el camino natural que sigue el bebedor de té comienza con las tisanas. De ahí se brincan a los blends y, por último, a los tés puros. Una vez que los prueban descubren un mundo increíble", finaliza el experto.
Si quieres conocer más sobre el mundo del té, una opción en México y que, además, está avalada por la Tea and Herbal Association of Canada, es la Academia Mexicana de Té, la cual se fundó hace casi siete años y cuenta con dos formaciones principales: diseñador de té y sommelier de té; este último lo puedes estudiar completamente en línea o de manera semi presencial.
No está de más recordar que, aunque en México se le llama té a cualquier infusión, para que un té sea considerado como tal, tiene que provenir de la planta de Camellia Sinensis. Esta codiciada planta, a su vez, tiene distintos subvarietes pero, básicamente, de ella se obtienen cinco tipos de té: blanco, verde, oolong (azul), negro y Pu-erh (rojo).
"Las principales diferencias de cada té son sus niveles de oxidación (o falta de) y las partes de la planta que se utilizaron para obtener cada uno. Por ejemplo: el té blanco se recolecta y marchita de manera natural; y no tiene ningún tipo de enrollado (proceso en el que se le extraen los jugos). El té verde se recolecta y lo que busca el productor es detener el proceso de descomposición de la hoja lo más rápido posible, técnicamente se recolecta y no se marchita ni oxida; mientras que el Oolong es uno de los más complejos, pues se recolecta, marchita, oxida, enreda y seca, repitiendo el proceso muchas veces. Por su parte, el té negro se recolecta, marchita, oxida y se seca a mayores temperaturas", explica Andrés Jurado, codirector de la Escuela Mexicana de Té.
¿Cómo elegir un buen té?
No importa el tipo de té que quieras comprar, lo principal es contar con un proveedor especializado y de confianza.
"No todo el té que se vende es de alta gama. También puedes encontrar de media y baja. Pero, para saberlo, tienes que contar con un vendedor de confianza", comparte Andrés.
"Para escogerlo fíjate que las hojas estén lo más enteras posible y no luzcan quebradizas: y, para conservarlo en óptimas condiciones," se recomienda guardarlo en bolsas o cajas herméticas, no ponerlo al lado del café o especias pues de lo contrario, absorberá sus aromas; además de mantenerlo alejado de la luz y la humedad", aconseja el experto.
La hora del té
Ya tienes el té perfecto y estás listo para disfrutarlo. Ahora lo que queda es saber cómo prepararlo a la perfección. "Realmente la infusión depende de la variedad del té y es algo que tu proveedor te debe de decir. Sin embargo, de manera general hay que cuidar la proporción del agua y las hojas de té, por ejemplo: nunca hay que rebasar los 90 mililitros de agua por cada gramo de té. También hay que cuidar la temperatura del agua: los tés verdes se infunden a menor temperatura y por no más de dos minutos, mientras que los negros, oolongs y algunos blancos se infusionan a mayor temperatura durante tres, cuatro y hasta cinco minutos, dependiendo de su gama", explica el codirector de la Escuela Mexicana de Té.
Té a la mexicana
La cultura del té en México crece año con año y, aunque no estamos ni tantito cerca del consumo que tienen otras naciones amantes de esta bebida, se espera que crezca el interés por ella. "Es un producto que, sin duda, está despertando mucho interés: estamos seguros que en los próximos años tomará una fuerza muy importante", asegura Andrés.
"La importación de té ha crecido mucho en los últimos 10 años. Por ejemplo, el año pasado se importaron entre mil 400 y mil 600 toneladas de té, aunque si lo comparamos con Chile, que es el país latinoamericano con mayor consumo y que importa 23 mil toneladas, esto te deja claro el nivel de consumo que hay. Pero es como en todo: mientras más cultura, mejores consumidores", comparte Andrés.
El consumo de té en México se refuerza con ayuda de algunas tendencias de consumo como lo son los famosos blends, la mixología y hasta la repostería: solo basta con ver los postres hechos con el popular matcha, un tipo de té verde pulverizado. "Sin duda, estas tendencias ayudan mucho a que el té llegue a distintos nichos y, aunque no se aumente el volumen de consumo, sí se encuentra en la mente de los consumidores. De hecho, el camino natural que sigue el bebedor de té comienza con las tisanas. De ahí se brincan a los blends y, por último, a los tés puros. Una vez que los prueban descubren un mundo increíble", finaliza el experto.
Si quieres conocer más sobre el mundo del té, una opción en México y que, además, está avalada por la Tea and Herbal Association of Canada, es la Academia Mexicana de Té, la cual se fundó hace casi siete años y cuenta con dos formaciones principales: diseñador de té y sommelier de té; este último lo puedes estudiar completamente en línea o de manera semi presencial.
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