Con música y baile dan el último adiós a Celso Piña

Monterrey N.L.- Con aplausos y al ritmo de "Los caminos de la vida" fue como miles de regios dieron el último adiós al “Rebelde de la Acodeón”, Celso Piña, quien falleció el pasado miércoles, víctima de un paro respiratorio.

La misa de cuerpo presente congregó a miles de fanáticos, quienes se dieron cita en la Basílica de Guadalupe, ubicada en la colonia Independencia, lugar de origen del grande de Monterrey.

El cuerpo de Celso Piña arribó al Santuario alrededor de las 11:48 horas, donde ya miles de personas lo estaban esperando, cantando sus canciones, con playeras alusivas, flores y bandas en la cabeza.

El Padre Juan José Martínez, manifestó en su mensaje tras el evangelio que los allegados al Rebelde de la Acordeón no deben estar tristes, porque él, siempre fue alegre, ocurrente y original

“Así era Celso, siempre ocurrente y original y hasta en su último momento fue ocurrente, porque él dijo, me voy en paz, no preparó a nadie y sin embargo, si preparó de alguna manera a todos”.

“Porqué, porque con cada cosa que él hacía tenía un objetivo claro, el objetivo de hacer que los demás vivieran, sabemos que como muchas veces el lo interpretó, que los caminos de la vida son difíciles”, manifestó.

Gritos de “¡Arriba Celso", porras y aplausos interrumpieron por momentos la emotiva ceremonia en la que algunos fans no pudieron contener las lágrimas.

Al concluir la misa de cuerpo presente, la familia llevó el cuerpo a las afueras, donde un grupo amenizaba, con canciones de Celso Piña, donde los más de 20 mil fanáticos entonaban melodías como "Los caminos de la vida", "Como el viento" y "Aunque no sea conmigo".

La Tuna Récords, la casa productora que lo representaba, instaló un toldo en el exterior del recinto católico, donde un grupo entonó algunas de las melodías que inmortalizó El Rebelde del acordeón, que al morir tenía 66 años, y proyectos inconclusos para efectuar duetos con diversos artistas.

Al finalizar la misa, el ataúd demoró una hora en salir de la Basílica, debido a que los presentes se acercaban para estirar la mano y tocarlo.

Momentos más tarde, partió el cortejo fúnebre, para recorrer las principales calles de la Colonia Independencia, lugar donde el Rebelde de la Acordeón nació, creció y vivió.

Frente a la casa de su hermano, Rubén tomando una cerveza, escuchaba a músicos que cantaba “Como El Viento”, una de las canciones con las que Celso se dio a conocer en todo México, junto con su grupo, La Ronda Bogotá.

Los miles de fanáticos, encabezado por la Carroza, recorrieron al lado de su ídolo calles como Nueva Independencia, Hilario Martínez, Alfredo Ríos y Santos Cantú Salinas, para dar el último adiós al cantante.