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Opinión Editorial


Kamala


Publicación:15-08-2020
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Es la primera mujer no blanca que formará parte de una fórmula presidencial, como candidata a vicepresidenta con Joe Biden

Su nombre significa flor de loto en sánscrito, y evoca a Lakshmi, diosa de la prosperidad, la buena suerte y la belleza.

Es la primera mujer no blanca que formará parte de una fórmula presidencial, como candidata a vicepresidenta con el abanderado demócrata Joe Biden, para los comicios del 3 de noviembre de 2020.

Kamala Devi Harris nació en Oakland, California el 20 de octubre de 1964. Sus raíces familiares se ubican en la antípoda de las políticas xenófobas y racistas de Donald Trump.

Su madre, Syamala Gopalan (1938), nació en Madrás, hoy Chennai, la capital del estado de Tamil Nadu, y murió en 2009. Fue una investigadora del cáncer y una activista por los derechos civiles. Su padre, Donald J. Harris (1938), es un economista nacido en Jamaica y naturalizado estadounidense, profesor emérito en la Universidad de Stanford.

Sus padres se conocieron en la Universidad de California en Berkeley. La senadora Harris se formó en la Universidad de Howard, en Washington, DC, y en la Escuela de Derecho Hastings, en el campus San Francisco de la Universidad de California.

El virtual candidato Joe Biden (Scranton, Pennsylvania, 20 noviembre 1942) se ha presentado a sí mismo como "una figura de transición", tanto en términos generacionales y demográficos, como en el ámbito político-ideológico. Si resulta electo presidente, cuando tome posesión el 20 de enero de 2021 tendrá 78 años, es difícil que se presente como candidato a un segundo mandato. Harris asumiría con 56 años de edad y tendría 60 si se postulara en 2024.

Biden se inclinó por Harris al menos por cuatro factores: 1) en respuesta al apoyo decisivo del electorado afroamericano durante las primarias; 2) haciéndose eco de las protestas antirracistas que han sacudido a EEUU; 3) su capacidad de atraer al mismo tiempo electores del flanco progresista y del sector tecnócrata de los demócratas, así como del electorado en su conjunto; y 4) su magnífico desempeño como rival suya en los debates durante las primarias: una arma invaluable si logran que la campaña electoral sea sobre Donald Trump y su pésimo manejo de la pandemia, que ha resultado en una profunda crisis de la salud y de la economía.

¿Qué busca ahora el Partido Demócrata? Evidentemente, ganar el colegio electoral.

En el fondo, sin embargo, la gran pregunta es: ¿qué propósito común plantean para EEUU? ¿cómo reconstruir la confianza en cada persona y en las instituciones, en la era de las noticias falsas? ¿cómo robustecer un sistema de salud fincado sobre el bien público y no exclusivamente sobre las ganancias de las corporaciones farmacéuticas y hospitalarias? En suma: ¿qué pacto social proponen Biden y Harris?

Kamala Harris tiene la experiencia y la calificación para ser vicepresidenta, y más importante aún, trae el fuego por dentro, quiere el cargo y sabe qué hacer con él.

Si Biden y Harris ganan, ella será presidenta del Senado. Pero, un momento: no han ganado todavía. Trump podría conquistar de nuevo el colegio electoral, aun si pierde el voto popular hasta por cinco millones de sufragios.

Sin embargo, si la fórmula demócrata dice algo sobre la diversidad y la capacidad de suscitar esperanza en el estado de ánimo de los electores en EU, la designación de Kamala Harris habrá probado ser muy acertada.

Twitter: @Carlos_Tampico



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