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Opinión Columna


Jaime y Manuel


Publicación:12-06-2020
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No nos gusta el chisme, pero con eso de la sanción a Jaime Rodríguez Calderón y a Manuel González ...

No nos gusta el chisme, pero con eso de la sanción a Jaime Rodríguez Calderón y a Manuel González por el tema de las Broncofirmas, ya se cruzan las apuestas.

Pero sobre todo, de quienes creen que ahora sí se podrá dar cumplimiento a mandato de una autoridad superior que tienen los legisladores del Congreso local.

Sin embargo, como esto se ha venido aplazando desde hace ya mucho tiempo, quién sabe si la labor de hoy sea determinante para el gobernador y su secretario de gobierno.

Especialmente, porque cada episodio donde se busca establecer el finamiento de responsabilidades que puede ser un abanico muy amplio, el legislativo se entrampa.

Por lo que ahora se afirma que el tema podría estancarse de nueva cuenta, especialmente si se conjugan cuestiones que tienen que ver inteligentemente con el Coronavirus.

Y, qué tendría que ver éste virus con la sanción, inhabilitación o destitución de las autoridades, quizá se pregunten muchos, pues que debido a ello no habría sesión.

Y, que en el peor de los casos, de no completarse el quorum por si se llegaran a reportar legisladores contagiado o bajo sospecha del Covid-19, no trabajarían.

Vaya, explicado con palitos y bolitas, si algún de los legisladores convocados para éste día, de cuadrar con el Coronavirus, no tendría acceso al palacio legislativo.

Con lo cual, los trabajos relacionados sobre el particular podrían no celebrarse de manera programada, ser votado y mucho menos pasar la aduana para dictar una sanción.

Así que valdrá esperar los trabajos de éste día y averiguar si los diputados locales se fletan o salen con oootra de sus novedades, perdón, perdón, le dan largas al asunto.

Pues será el sereno, pero un grupo de ciudadanos que buscaba ponerle un clavo más al caso de las Broncofirmas, hizo berrinche ayer mismo.

Lo anterior, porque simple y sencillamente, cuando los integrantes del Grupo Makios se quedó con el bat al hombro con sus ''buenas'' intenciones.

Pues, salieron pataleando de las instalaciones del Congreso local, al afirmar que en la Oficialía de Partes los retornaron a sus casas como llegaron.

Y, que bajo la advertencia que no se estaba recibiendo ninguna papelería, les pidieron que volvieran en otra ocasión. Conste eso dicen.

Y, como prueba de ello, se dieron a la tarea de desplegar su protesta con algunos cartelones en mano, reclamando sus derechos.

Aunque los últimos meses las clases tuvieron que realizarse en casa ante el surgimiento de la Pandemia, los padres de familia ya andan con oootro problema que les queja.

Esto, desde luego no tiene nada que ver con la culminación del ciclo escolar, sino más bien, con la proyección del siguiente, pues hay cuestiones que no se perdonan.

Se trata precisamente del cobro de las cuotas escolares o cooperaciones voluntarias, que para fines prácticos es la misma gata, pero revolcada, sin plazos, ni abonos chiquitos.

Es más sin ninguna clase de descuento, muy a pesar de que el ciclo pasado se adelantaron cuotas por clases presenciales y no las hubo por el llamado Covid-19.

Y, que para esta ocasión, mantendrá la misma taza que antes, muy a pesar de que no se ha definido fecha de retorno presencial a las aulas y que todo se cotiza de esa forma.

Por lo que ahora los gastos de ''papelería'' como dicen en la escuela, por ahora ya no estarán a cargo de las autoridades educativas, sino de los padres de familia.

Así que ya se imaginará como andan quienes tienen fecha de pago, perdón, perdón, de cooperación voluntaria si quiere garantizar las clases de sus muchachos.

A ver, a ver, con eso de la ampliación y limpieza de las banquetas en Monterrey, quién le está quedando mal al alcalde Adrián de la Garza.

Especialmente, cuando la verdad hay que reconocerlo, hay espacios que quedaron muy bonitos, muy amplios y que dan una sensación de primer mundo.

Pero en contraste con lo realizado a la fecha, hay sitios donde los vendedores informales siguen haciendo de las suyas, afeando la ciudad.

Y, si no lo quiere creer basta con darle una vuelta a los vendedores de Colegio Civil, donde muchos de los puesteros sientan sus reales.

Por lo que se aprecia una gran cantidad de estructuras metálicas que sirven de exhibidores a los ambulantes, pues ahí no aplica ''banquetas amplias''.

Ah, y sobre todo, despejadas, porque es menos lo que se da en ese lugar con las cuadriculas de metal clavadas de manera permanente en el suelo.

Lo cual en todo caso, vendría ser responsabilidad de Servicios Públicos, encargada de la liberación de vía pública, a menos que la instrucción sea otra.

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