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Opinión Editorial


Día de los medios de comunicación social


Publicación:20-05-2019
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La comunicación social, además de ser un campo de estudio inherente a la vida colectiva del hombre, es una necesidad que la vida del hombre implica su existencia, sus relaciones humanas y la posibilidad de conocer lo que sucede en cualquier parte del mundo.

Durante el siglo XX conocimos instituciones que requerían de la comunicación para hacer llegar sus ideales, su visión del mundo, sus aportaciones a la filosofía, a la ciencia, al arte y a las humanidades, razón por la cual, crearon un sistema de comunicación social, donde los medios eran desde los más simples, sencillos y directos, hasta los más teóricos, especulativos y dogmáticos, siempre pensando en cumplir los fines de su filosofía y de su visión del mundo.

Entre las instituciones de la sociedad civil, la Iglesia Católica ocupó un lugar relevante en la promoción de la comunicación social a efecto de hacer llegar a todos los círculos sociales sus ideales y sus convicciones en medio de todas las corrientes de pensamiento, de procedencia diversa.

El Estado hizo lo propio a través de sus instituciones educativas, culturales y de información social, para generar un pensamiento social acorde con las instituciones jurídicas y políticas que las circunstancias históricas iban creando, generando y transformando.

La revolución científica y tecnológica vivida por los pueblos durante el siglo XX y lo que va del siglo XXI, ha generado cambios relevantes en todas las instituciones, particularmente en el uso de las tecnologías de la información y de la comunicación, al extremo de manifestarse en cambios significativos en las formas de interpretación de la realidad social.

Las ciencias sociales que indagan, explican y dan fundamento al conocimiento de los fenómenos sociales, tales como la sociología, la política, psicología y la semiótica, tienen efectos prácticos en el periodismo, la opinión pública, la publicidad, la mercadotecnia y las relaciones públicas e institucionales.

Este 23 de mayo se ha instituido como el Día mundial de los Medios de Comunicación Social,  donde los principales medios harán su planteamiento del rol que les toca jugar, de su contribución a la cultura, a la paz mundial, a la mejora de las relaciones internacionales entre los gobiernos, entre los pueblos.

En el contexto de la presente revolución tecnológica, los aparatos de comunicación  han sido objeto de adecuaciones y adaptaciones donde se realizan procesos educativos, culturales y de orientación política e ideológica, de las más variadas corrientes de pensamiento.

Para los estudiosos de la comunicación social es relevante las expresiones de comunicación entre los hombres en todos los tiempos y en todas sus manifestaciones, hasta llegar al uso de instrumentos y medios electrónicos en los últimos tiempos, que influyen en el pensamiento social, científico, filosóficos y político, generando nuevas teorías y conocimientos, que nos obligan a reconsiderar teorías, metodologías y conocimientos anteriores.

En la antigüedad el hombre utilizaba diversas formas de comunicarse y así evolucionó de la palabra escrita a mano al texto mecanográfico y después al uso de máquinas eléctricas, para desembocar en la tecnología computacional, donde los recursos tecnológicos han acabado con todo rubro de imaginación humana, y en la actualidad en un teléfono celular puedes traeruna microcomputadora, para comunicarse en forma individual o colectiva, archivar información, enviar mensajes locales, nacionales, internacionales y mantener una comunicación mundial, jamás imaginada.

Entre las instituciones tradicionales de comunicación de conocimientos, la escuela ha jugado un rol importante, y en la actualidad se le han incorporado tecnologías para actualizar sus posibilidades de transmisión de conocimientos. Las tecnologías de la información y la comunicación, en su crecimiento,  han superado tanto a la institución educativa, que a los jóvenes estudiantes se les ofrece acreditar materias, cursos y grados de estudio por medios electrónicos, lo cual, es reconocido por las autoridades educativas del Estado y del gobierno Federal.

Los nuevos retos que aparecen ahora con la comunicación pública y masiva, radica en hacia dónde se conduce ésta dentro del contexto social moderno. Quiero decir con ello que por un lado, la comunicación pública y masiva, vía los medios de comunicación como YouTube, se vuelve “privada” y fraccionaria o gremial, reducida a un grupo “pequeño” de personas que se pueden contar por cientos de miles, si no es que millones, pero donde el alcance de esa información y su calidad de mensaje raya entre lo anecdótico y el comentario digno de una editorial, cuando lo más. 

En algunos casos, igualmente “particularmente abundantes”, las escuelas de educación superior suben sus conferencias especializadas, con grandes expositores académicos y teóricos, abriendo con ello el acceso a un radio de información y formación académica que antes no se tenía. Así, la alta cultura o la cultura tecnologizada y, a su vez, operativa con información igualmente abundante y significativa, permite que se amplíe para el beneficio de la sociedad, en sectores y países antes inimaginables.

Este es el nuevo espacio de la comunicación pública y masiva, particular y fraccionaria a la vez, profunda y personalizada, erradicativa de retrasos informativos y formativos a nivel teórico y académico, y a la par de eso, totalmente anecdótica, oficiosa de llenar de espacios vacíos, de una aceptación cuasi personal si no que gremial, y en sus mejores logros, de calidad de observación editorial en cualquier tema.

Lo profundo y lo banal, los educadores del siglo XXI nos enfrentamos ante una situación donde el estudiante sabe ya, teórica y quizás operativamente, lo que nosotros le vamos a enseñar. Una comunicación que no va en dos vías, sino en una sola, en la del aprendiz, que se engrosa en la medida en que se vuelve más especialista en obtener la información que le interesa.

 



« Redacción »
Arturo Delgado Moya

Arturo Delgado Moya


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