Exigen reubicar a familias afectadas

En el ejido de Nueva Tacuba, del municipio de Chilón, la tierra no deja de moverse y a los habitantes les preocupa que ésta se abra más ante los deslaves y las grietas provocados por las lluvias recientes, por lo que pobladores y autoridades piden la reubicación de 39 familias cuyas viviendas colapsaron o tienen daños mayores. Autoridades comunitarias indicaron que a la incertidumbre por los hogares destruidos se añaden la falta de servicios básicos y la desatención institucional. Fuentes de Protección Civil de Chiapas informaron que el deslizamiento parcial de una ladera destruyó y afectó a 31 casas en esa zona, debido a las lluvias que ocasionaron el frente frío número 11 y la tormenta tropical "Eta". El reporte oficial consignó que los daños se registran en el barrio Gemel, donde cinco viviendas colapsaron y 26 más están inhabitables y en riesgo de caer. Pedro Gómez Sánchez, secretario del comisariado ejidal, dijo que las 39 familias afectadas "están en la calle" y refugiadas con familiares y amigos. Desde hace algunos días, aseguró, en la zona "ya no se duerme contento por la preocupación de que se abra la tierra". La población, detalló la autoridad comunitaria, carece de energía eléctrica y agua potable, lo cual dificulta la comunicación. Los daños a la carretera les causan problemas para ingresar y salir. En el mismo tono, Juan Gómez Sánchez, presidente del comisariado ejidal, aseveró que no tienen agua potable, luz eléctrica ni caminos. Sebastián Sánchez Méndez, presidente del Patronato de la carretera y energía eléctrica, pidió la intervención de los tres órdenes de gobierno, "pero no nos hacen caso. Necesitamos que los especialistas dictaminen qué es lo que está pasando, porque sólo han llegado funcionarios de Protección Civil de Chilón" y no se conocen aún los resultados de los estudios. REALIZARÁN CENSO PARA OTORGAR APOYOS ECONÓMICOS A partir del 23 de noviembre, los gobiernos federal y estatal iniciarán el levantamiento de un censo para saber cuántas personas resultaron afectadas por las inundaciones en Tabasco, con el objetivo de entregar apoyos económicos para arreglar las casas, reactivar el trabajo en el campo y ayudar a los afectados. El gobernador del estado, Adán Augusto López, y el secretario de Bienestar, Javier May, informaron este miércoles que el ejercicio se realizará en mil 396 localidades afectadas y durará dos semanas. Se tiene previsto que antes del 20 de diciembre se entregue a los damnificados un vale de 8 mil pesos para pintar y sanear sus casas, además de otro vale, del cual no se especificó el monto, para adquirir enseres. El objetivo es que la ayuda llegue a las miles de personas que, desde octubre, han sufrido inundaciones por la intensidad de las lluvias, el desbordamiento de ríos y el desfogue de presas. Se precisó que para el levantamiento del censo se desplegarán 2 mil servidores públicos federales. Primero se tomarán en cuenta las comunidades a las que ya se puede ingresar y las autoridades se mantendrán pendientes de los lugares donde aún hay afectaciones graves. Indicaron que el ejercicio también servirá para plantear otros programas multianuales para atender problemas más profundos de los tabasqueños: "Evidentemente hay una molestia, una irritación social de quienes fueron afectados y perdieron todo, perdieron parte de sus bienes y sus esfuerzos de vida, pero es indudable que el señor Presidente ha ayudado a Tabasco desde el primer día de su gobierno", afirmó el mandatario estatal. Agregó que entre diciembre y enero se iniciarán obras como el dragado de los ríos que rodean a Tabasco, la rehabilitación de la red carretera y de calles afectadas, entre otras obras. En tanto, el secretario de Bienestar explicó que el censo se realizará presencialmente y se tomarán medidas preventivas para evitar que se dupliquen los apoyos a una misma familia. Sin embargo, el funcionario no informó de dónde saldrán los recursos para atender la emergencia y se limitó a decir que no había un tope presupuestal para esta situación.